Carole Simonnet/Agencia Reforma
MÉXICO, D.F.- El 11 de abril de 2012, en medio de la campaña de Josefina Vázquez Mota desdibujada por tropiezos y fallas logísticas, Xóchitl Gálvez marcó al número del Rancho de San Cristóbal. No pudo comunicarse con Vicente Fox, pero Marta Sahagún escuchó al otro lado de la línea el reclamo de la ex comisionada para la Atención de los Pueblos Indígenas.

"Me parece injusto que abandonen a Josefina de esta manera, o sea, si hubo dos personas que dimos la cara en su gobierno fuimos Josefina y yo", se quejó. Horas antes, el ex mandatario había declarado en una entrevista radiofónica que sólo un "milagro" haría ganar a la panista, aunque aseguró que apoyaba a su ex secretaria de Desarrollo Social. Diplomática, la ex primera dama quedó de operar un control de daños.

Gálvez propició con su llamada el reencuentro del ex presidente Fox con Vázquez Mota. Se concretó el 25 de abril en un hotel de Monterrey. "Mi presidenta Josefina, mi presidenta Vázquez Mota: ya sabes que soy panista, ya sabes que tengo convicciones, ya sabes que tengo y hago compromisos.

Cuentas conmigo incondicionalmente", declaró ese día al dejarse fotografiar junto a la candidata a la Presidencia.

La aparente reconciliación entre el ex gobernador de Guanajuato y su partido terminó en un nuevo fiasco. El 3 de junio, a menos de un mes de la jornada electoral, Fox llamó abiertamente a cerrar filas con el candidato priista Enrique Peña Nieto, puntero en las encuestas.

El episodio es revelador de la actitud de Fox en los últimos seis años, quien pasó de apoyar las acciones del gobierno de su sucesor Felipe Calderón -al menos en sus declaraciones iniciales-, a ser el principal detractor de la guerra contra el narcotráfico.

Desde que dejó Los Pinos, el 1o. de diciembre de 2006, Fox se instaló en su rancho de San Cristóbal convertido en el Centro Fox. Si bien se mantuvo alejado de la vida interna del PAN, aceptó apoyar a su partido en las elecciones intermedias de 2009.

"Créanme, vamos a salir adelante porque al trabajo nada lo vence; más allá de andar en las fotografías, de andar en la televisión y andar presumiendo carita el tal Enrique, lo que tendría que hacer es trabajar (...) Junto con ustedes le vamos a decir a Enrique (Peña) 'no se te hizo, jovencito', no todo es televisión en esta vida", expresó en un evento en San Mateo Atenco el 19 de junio. Un día antes, en San Luis Potosí, el ex Presidente enalteció la valentía de Calderón por luchar frontalmente contra los cárteles de la droga.

Sin embargo, en lugar de votar, Fox prefirió volar a París para festejar con su familia su cumpleaños, el aniversario de su triunfo en 2000 y su aniversario de bodas. De regreso de Europa, Fox contrajo matrimonio religioso en una ceremonia a la que no fueron invitados los liderazgos del PAN.

Ese año se cerró también la disputa judicial de 4 años que la ex primera dama mantenía con Proceso y la escritora argentina Olga Wornat. Sahagún logró que la periodista pagara 500 mil pesos por daño moral pero fracasó en condenar a la revista a pagar 1,9 millones de pesos por revelar detalles de su vida íntima con su primer esposo, Manuel Bribiesca.

Fox llamó abiertamente a cerrar filas con el candidato priista Enrique Peña Nieto

Con la estrepitosa derrota electoral, el ex Presidente se distanció aún más del PAN y de Calderón con quien ha tenido una historia de desencuentros desde que el michoacano le ganó la candidatura a Santiago Creel en 2005.

Desairó el Consejo Nacional del PAN del 9 de agosto de 2009 y criticó la imposición de César Nava como nuevo dirigente del PAN tras la renuncia de Germán Martínez. "Yo no tengo nada absolutamente nada en contra de él. Lo estimo mucho, lo respeto mucho, pero me parece que, para los tiempos y para el partido, hubiera sido mejor una opción ahorita mucho más fogueada, con mucho más experiencia, con mucho más madurez, porque hay que lidiar con problemas y retos muy grandes en este tramo que sigue adelante", sostuvo al día siguiente de la designación del ex diputado federal.  Cinco días después, desde Culiacán, aventó una nueva piedra a Calderón: se pronunció por el regreso inmediato del Ejército a sus cuarteles.

Aunque Calderón mandó emisarios a Guanajuato para pedirle que guardara silencio, prosiguió su activismo político en foros internacionales a los que desde 2000 lo invitan como conferencista por su hazaña de haber sacado al PRI de los Pinos. Dedicó también su tiempo a recabar fondos para el Centro Fox, al que definió como una escuela de formación de líderes para la democracia. Abrió la puerta del centro a las revistas sociales, desarrolló cursos de capacitación y seminarios para diputados, alcaldes y militantes de todos los partidos e invitó a los alumnos de escuelas de todo el país a ser "presidente por un día".

En el verano de 2010, Fox subió el nivel de sus críticas a través de un blog en el que arremetió contra el calderonismo por crear más pobres y fracasar en su política de seguridad. Planteó la legalización de las drogas y coronó el año con un elogio a Peña Nieto, a quien calificó como miembro de "una nueva generación de priistas".

Ante las críticas permanentes de Fox, Calderón lo acusó de haber dejado crecer el narcotráfico durante su gestión. "Tengo un gran respeto por el ex Presidente Fox, pero creo que cometió muchas equivocaciones en este asunto: quizás la más importante fue no actuar a tiempo en relación con el mismo (y) creo que si México hubiera comenzado a luchar contra este problema hace 10 años, estaríamos hablando ahora de un asunto completamente diferente", le reviró.

La molestia en los Pinos se tradujo también en enero de 2012 en la reactivación de la denuncia por enriquecimiento ilícito interpuesta en 2007 por el ex promotor de "Amigos de Fox", Lino Korrodi. La PGR cateó las propiedades del ex mandatario: el rancho San Cristóbal, la Ex Hacienda San Cristóbal, el Centro Fox y el rancho La Estancia.

Xóchitl Gálvez lamenta la confrontación abierta que se dio en la recta final del sexenio entre los dos ex presidentes panistas y en un intento por explicar la postura de Fox, afirma que se puede deber al temor de que Andrés Manuel López Obrador llegara a la Presidencia.

"No comparto su visión de que López Obrador es un peligro pero creo que cuando (Fox) vio que Josefina no había tenido una campaña ganadora, ante el posible peligro que ganara Andrés Manuel, creo que prefirió cerrar filas con el PRI, finalmente hay un ala del PRI bastante de derecha y neoliberal y Fox se identifica mucho con esta ala", explica.

Para el ex vocero de Vicente Fox, Rubén Aguilar, Calderón no supo aprovechar el principal activo que tenía el PAN, un político poco tradicional que siempre dice lo que piensa. "El PAN y el gobierno del Presidente Calderón no supieron utilizar en términos políticos su mayor capital, que era el Presidente Fox, un hombre que salió con un altísimo nivel de calificación y aceptación, con un gran contacto con la población, y que además logró que el electorado volviera a votar por su partido".

Considerado un "traidor" por sus compañeros de partido, Fox enfrenta ahora un proceso de expulsión sin parecer tener la menor preocupación al respecto. Apenas el 22 de noviembre pasado, en una entrevista con periodistas españoles, Fox externó su felicitad. "Antes se acostumbraba que los expresidentes se mantuvieran callados, pero Marta y yo hemos descubierto que hay vida después de la Presidencia", sostuvo.

Tres días después, Fox dijo que valorará si se reafilia al PAN y condicionó su permanencia en el partido a que éste retome sus principales causas y apruebe las reformas estructurales impulsadas por Enrique Peña Nieto.