El poder no es el mejor camino para llegar a la equidad

José Colmenares, director La Opinión de Cúcuta, ofreció informe de la delicada situación de los periodistas en Colombia.

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La bloguera cubana Yoani Sánchez, al terminar su intervención, le acompaña el el presidente de la SIP, Jaime Mantilla (c). (sipiapa.org)
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SIPSE.com
MÉRIDA, Yuc.- Los poderes no controlados, la inequidad y la falta de todo el uso de los valores democráticos son los grandes enemigos de las naciones, señaló el presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), Jaime Mantilla, quien exhortó a México a buscar lo antes posible la paz.

El también director general del diario ecuatoriano, Hoy, señaló en entrevista con el director de la Asociación Periodística Síntesis, Óscar Tendero, que el uso desmedido del poder de algunos políticos, representa uno de los grandes problemas para la libertad de expresión.

“La SIP y la sociedad deben darse cuenta que el poder no es el mejor camino para llegar a la equidad que necesitamos en nuestros países”, destacó Mantilla, quien mencionó que el papel fundamental del periodismo no es sólo defender los valores de la democracia, sino buscar el respeto.

Impunidad, común en agresiones a periodistas

Por su parte, a José Eustorgio Colmenares Ossa, director La Opinión de Cúcuta, Colombia, lo que más preocupa en torno a las amenazas y asesinatos que llegan a tener los periodistas en general, es que las autoridades gubernamentales nunca terminen concluyendo quiénes son los autores de esas intimidaciones.

En el marco del informe sobre la situación que vive ese país en torno a la libertad de expresión, que expuso ante los miembros de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), el comunicador exhortó a los países a mejorar sus sistemas de investigación, para que puedan llevar ante los jueces las personas que cometen homicidios y éstos no queden impunes.

“Los gobiernos deberían estimular e inyectar mucho más recursos y mucha más tecnología para que los organismos de investigación puedan llevar a cabo estos procesos”, precisó el directivo.

De igual manera, destacó que otra preocupación que existe es el incremento de las acciones judiciales, algunas veces instauradas por funcionarios de las distintas ramas del poder público, o de otras personas, con lo cual se pretende intimidar o censurar a columnistas, periodistas o a los medios informativos.

Situación preocupante

 

Explicó que tan solo en Colombia, las demandas que se han hecho sobre este tipo de cosas a cortes judiciales externas, generalmente funcionan bien; sin embargo las estancias locales tienen muy poca credibilidad, puesto que son manejables por demasiadas influencias.

“En mi país, la clase parlamentaria en muchas oportunidades se sienten ofendidos por lo que publican los medios de comunicación sobre ellos y de alguna u otra forma, de pronto quieren tomar una represalia en esos sentidos”, opinó.

Colmenares Ossa informó que, de acuerdo a la Fundación Para la Libertad de Prensa, que tiene más de 30 años establecida en Colombia, tienen asentados más de 140 asesinatos de periodistas en ese mismo lapso de tiempo, de los cuales solamente 17 casos tuvieron resoluciones de acusación para algunos autores materiales e intelectuales.

Esto representa que el 84 por ciento de los casos de periodistas en los últimos 30 años están en la impunidad.

“Un caso ejemplo sería el de mi padre asesinado, también periodista, José Eustorgio Colmenares Baptista, que cumple 20 años el próximo 12 de marzo; se abrió la investigación en 1993, y en el 2001 declararon inocentes a las dos personas que estaban juzgando y nunca, posteriormente, hicieron más investigación o acusaron a los autores intelectuales. Y así la mayoría de los casos, en general la justicia en Colombia es bastante electa para resolver estas cosas”, apuntó.

No obstante, el director del periódico La Opinión de Cúcuta, Colombia, indicó que ahora, la presión de los medios ha ayudado a que la autoridad sea un poco más efectiva, además de que ahora hay más organizaciones dedicadas a defender a los periodistas, y hay más leyes que tratan de proteger o estimular la aclaración de los asesinatos.

“Creo que en eso los periódicos hemos sido débiles, la SIP está dedicada muy fuertemente a mejorar notablemente la calidad del periodista y haciéndolo se mejora la calidad de la información que transmite y podremos mejorar la calidad de nuestros ciudadanos y de esa forma, serán más duros para aceptar las frases falsas y las promesas falsas de los populismos”, dijo.

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