Agencias
MÉXICO, DF.- Al término de este 2012, la industria joyera en México alcanzó exportaciones por mil millones de dólares a 36 países alrededor del mundo, toda vez que su estrategia enfocada al desarrollo de diseños vanguardistas le ha permitido la comercialización de sus productos en naciones como la India, Libia y Pakistán, entre otros.

Horacio Vázquez, presidente  de la Cámara de Joyería Jalisco, dijo que a pesar de la desconfianza que mantienen los mercados financieros, esperan que en 2013 el valor de sus ventas en el exterior suba 5 por ciento, según informa Milenio.

Dicha tendencia va ligada a que en este año el sector ha logrado incrementar 20 por ciento las zonas donde sus productos son cotizados, ya que pasaron de exportaciones a 30 países a más de 36, entre los que destaca el medio oriente, con naciones como India, Libia, Pakistán, entre otros.

La industria espera alcanzar un crecimiento positivo de 5 por ciento.

Aun cuando algunas de estas naciones tienen un ingreso per cápita inferior al de México, sus habitantes mantienen la costumbre de comprar joyería fina, con calidad no menor a los 18 o 22 kilates, en el caso de las piezas de oro, lo cual convierte a estas entidades como nicho importante de negocios.

A pesar de esta tendencia positiva en los mercados del medio oriente, el directivo reconoció que en este año, una de principales preocupaciones fue la caída de 20 de sus ventas en el mercado europeo, principalmente en España, debido a la crisis que se enfrenta en dicha zona.

Sin embargo, aseguró que por lo menos 80 por ciento de lo que se produce en el país es exportado a Estados Unidos, mercado que se ha mantenido estable en su consumo de joyería.

No obstante, a fin de no perder competitividad o clientes, la industria joyera de México mantiene su apuesta a la fabricación de joyería con diseños innovadores, esto con el objetivo de dar un valor agregado a las piezas y no solo por los metales preciosos que se utilizan, lo cual les permite diversificar sus materias primas.

Esta tendencia ya les permite competir de manera importante con los productos de otros países, principalmente Italia.

Es así que al término de este año, la industria espera alcanzar un crecimiento positivo de 5 por ciento.

“No fue un año sencillo, pero sí tuvimos más estabilidad en el precio de la materia prima, en comparación a los años anteriores e incluso disminuyó 10 por ciento”.