Agencias
MÉXICO, DF.- El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, aseguró que durante los próximos seis años la Ciudad de México estará protegida de los cárteles de la droga que operan en el país gracias al Escudo Centro.

Su trabajo como procurador y su propuesta en campaña de reforzar la seguridad en la capital le otorgó un triunfo histórico para una elección local. Para el ex procurador, la ciudad es un espacio territorial fuerte desde su origen y de difícil acceso para el crimen organizado, informó en entrevista con MILENIO.

“Por la estructura y la forma en que hace su supervisión y vigilancia, con la fuerza de seguridad pública que tiene y por la comunicación con instancias federales, se complica (la operación) de las organizaciones delictivas y el narcotráfico”, indicó.

Sin embargo, el mandatario local reconoció que el principal delito por combatir es el narcomenudeo en cadena, lo que ocupará presupuesto y especial atención por parte de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal y la procuraduría capitalina.

“Haremos un esfuerzo importante que tendrá que dejar buenos resultados, combinándolo con la extinción de dominio. Tenemos incidencia delictiva que hay que atender día a día y hay que estarla replanteando todo el tiempo”, afirmó.

La propuesta del Escudo Centro, que Mancera asegura coincide con la Estrategia Nacional de Seguridad planteada por el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, incluye a Hidalgo, Estado de México, Puebla y Tlaxcala. Ahora se suma Guerrero, uno de los territorios donde convergen lo cárteles más violentos del país.

“Es importante tener una zona donde tengas unificada la capacidad de respuesta. Esto quiere decir que sí existen las mismas capacidades jurídicas, operativas, tecnológicas y de desplazamiento; el resto son protocolos homologados de comunicación”, explicó.

Además este escudo trabajará en el combate de los delitos en común con las otras entidades, como secuestro y crimen organizado, con miras a extenderse toda la República mexicana.

“En un momento dado, el bloque de la zona centro puede hacerle un planteamiento a la Federación o puede llevarlo a la Conferencia Nacional de Gobernadores. Creo que cuando hay buenas prácticas estatales deben replicarse.”

“No dejaré una gran obra pública”

Además de la seguridad, Mancera ve otros problemas que se deben atender en la ciudad, como empleo, economía y aportación capitalina al medio ambiente. No obstante, el ex procurador estableció que durante su administración no dejará como legado “una gran obra pública”, como lo fue en su caso la Línea 12 del Metro, con el ex jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard.

“Me interesa mucho cumplir con las decisiones por colonia, cumplirle a la gente y que tenga una ciudad bonita. Que tenga pavimentación, banqueta, mobiliario y progreso, todo lo que tenga que ver con el rescate de espacio público”, afirmó.

El mandatario detalló que para las delegaciones se ha pautado un diálogo cercano y anunció que a partir de enero de 2013 el city manager será el enlace y encargado del trabajo permanente con las 16 demarcaciones políticas.

Le he dicho a “los jefes delegacionales que vamos a ir por proyectos conjuntos, que lo que haga el gobierno no puede ser aislado, solo que por la realidad económica del país y la realidad presupuestaria hubo que hacer ajustes”, detalló.

Urbe de libertades

Cuatro días antes de que Mancera asumiera como jefe de Gobierno, un grupo de personas que protestaban por la toma de posesión del presidente Enrique Peña Nieto ocasionaron disturbios en el Centro Histórico. Esto provocó que de más de 90 personas, en su mayoría jóvenes, fueran consignadas a las autoridades.

Luego de las averiguaciones, solamente quedaron 14 detenidos, que algunos sectores señalaban como “presos políticos”, a lo que Mancera respondió: “Esta es una ciudad de libertades y lo va a seguir siendo. No tenemos un gobierno ni de venganza ni represor. Es un gobierno que tiene que dar seguridad y que acompañe el hecho de la manifestación. No tengo ningún interés de que alguien pueda considerarse preso político en mi gobierno”, explicó.

“En el gabinete está la gente que tiene que estar”

En lo político, Miguel Ángel Mancera es un hombre precavido y aunque fue criticado por no considerar en su gabinete a gente de diversas tribus políticas del Partido de la Revolución Democrática, al que representa sin afiliación, afirmó que es una decisión que no le afectará en sus relaciones con el resto de las fuerzas políticas.

“La gente que está en el gabinete es la gente que consideré que tenía que estar, con base en sus capacidades, posibilidad de desarrollo, forma de trabajo y porque son afines a los proyectos que tengo para la ciudad. Entonces, en ella pueden estar representados personajes de todas las fuerzas políticas. Hay que cambiar un poco esta visión de que si eres de tal corriente o no, eso te hace ganar o perder”, aseveró.

Va por reforma para el DF

Otra propuesta de Mancera es la reforma constitucional del DF, de la que ya se han hecho varios intentos. La ventaja, a decir del mandatario local, es que en esta ocasión existe consenso.

“Es un momento donde se debe hacer esa gran transformación y no dejar nada pendiente. No hablo de una mutación a un estado, el Distrito Federal debe ser la Ciudad de México, una capital donde se convive y se tiene cohabitación con los poderes federales y donde hay que tener claros los esquemas de seguridad, de atención a las necesidades y de interacción con los otros estados”, aseguró.

En la oficina del jefe de Gobierno, ubicada en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, están las fotos de sus dos hijos, plumas, su equipo de música, un ipad, ipod y libros que los “acompañan”.

Su personalidad es ligera, pero con carácter, y al preguntarle qué le va a pedir a los Reyes Magos, adelanta que salud y fortaleza para cumplir con todas las tareas pendientes.

“Mi proyecto más caro y grande es la pavimentación y embellecimiento de la ciudad. Si se puede terminar el gobierno y puedes decir que ahora sí la ciudad está bonita, con eso nos damos por bien servidos”.