Evaluación de maestros debe provocar cambios en Normales

Mexicanos Primero y Suma por la Educación advierten que sin la formación adecuada para los maestros, los resultados volverán a arrojar las mismas limitaciones.

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De acuerdo con organizaciones de la sociedad civil, evaluar desempeño, ingreso y promoción docente es importante. Imagen de archivo de la evaluación para la promoción magisterial en 263 sedes de 30 entidades de la República mexicana. (Archivo/Notimex)
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Alma Paola Wong/Milenio
MÉXICO, D.F.- El país evalúa al magisterio sin tener aún parámetros definidos sobre cómo y en cuántos maestros se aplicarán los resultados para la mejora del servicio profesional docente.

De acuerdo con organizaciones de la sociedad civil, evaluar desempeño, ingreso y promoción docente es importante; no obstante, urge que el gobierno federal dé a conocer un nuevo modelo educativo para las escuelas normales, así como un diagnóstico completo y detallado por región sobre cuántos maestros egresan y cuántos hacen falta, no solo por motivos de jubilación.

David Calderón, presidente de Mexicanos Primero, advirtió que es necesario un estudio pormenorizado de cada escuela normal del país para conocer las condiciones de la formación docente y poder medir la efectividad de la histórica institución.

La recopilación de esta información, añadió, es fundamental para establecer un mecanismo de seguimiento a los egresados, su participación en los concursos y su desempeño ya en servicio.

"La evaluación sin la formación se vuelve estéril. La Reforma Educativa en la parte legal puso un subrayado en la evaluación, pero falta un equilibrio que la formación sea la contraparte, si no hay una formación adecuada de maestros, la evaluación nos va a seguir arrojando las mismas limitaciones que se van a perpetuar.

"La evaluación tiene sentido como diagnóstico para la mejora si hay después los elementos para lograr esa mejora. De nada nos sirve tener esquemas muy rigurosos para identificar las carencias de los maestros si estas carencias no van a ser atendidas, primero, reformando la formación inicial en las normales o en otras escuelas formadoras de maestros, y por el otro lado, sin que los cursos de regularización y de formación permanente atiendan esas carencias", expuso.

Recientemente, el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) presentó el informe "Los docentes en México" en el que alertó de un déficit entre los egresados normalistas y las vacantes que pueden quedar por los profesores en edad de retiro.

Advierten que es necesario un estudio pormenorizado de cada escuela normal del país para conocer las condiciones de la formación docente

Ahí establece que en 2013, unos 84 mil 768 docentes de escuelas públicas y tres mil 371 de privadas cumplen con requisitos para pensionarse.

Pero las cifras, estimó el estudio, pueden ir en aumento, ya que para 2018, 61 mil 376 profesores se estarán pensionando y en 2023, 160 mil 166.

"Las cifras de pensionados potenciales a cinco y 10 años son relativamente grandes y deben ser consideradas por las autoridades educativas federales y locales para anticipar la formación inicial de los docentes requeridos en el futuro", se lee en el documento.

Por ejemplo, añade, en 2013, el número de plazas vacantes para primaria y secundaria se estimaba en 81 mil 818, mientras que las cifras de egresados normalistas de los últimos años para ambos niveles era de 17 mil.

"Lo que presentó el INEE es un cálculo muy genérico, no está mal hecho, pero lo que tiene es que está considerando el global del país, el avance demográfico y el ritmo de las jubilaciones, pero las necesidades en cada estado son muy diferentes, hay estados donde faltan maestros y otros donde sobran. Hasta ahora el cálculo de las plazas sigue siendo totalmente estadístico con cálculos demográficos en computadoras, nadie ha ido a las escuelas, nadie hace una distinción entre normales", aseveró Calderón.

Para María Teresa Ortuño, de la organización Suma por la Educación, la reforma educativa supone dos retos para el magisterio: cantidad y calidad.

Ahora, explica, la evaluación docente acota más el número de potenciales profesores, pues al concursar las plazas y escoger a los mejores perfiles, no todos los egresados accederán a un lugar en automático.

"Tenemos un déficit de profesores que pueden ser idóneos para el servicio. Con la reforma, al moverse el epicentro en el que debe ser importante el niño y la calidad de la educación, cambian muchas cosas. Antes había plaza automática, ahora ya no porque me escogerán en un examen. Suponiendo que todos fueran idóneos de todos modos no alcanza, ahí están las cifras, no nos dan", advirtió.

La especialista expuso que ante este panorama la profesión comienza a perder atractivo, lo que reduce aun más la matricula en las escuelas normales.

"No va a haber docentes suficientes y sobre todo parámetros mínimos, cómo se va hacer para atraer más a la profesión, porque el atractivo ya no es que salgan con la plaza asegurada de maestro, independientemente del nivel de preparación que haya adquirido", detalla.

Agregó que no descarta que la autoridad educativa federal tenga un diagnóstico más profundo sobre el panorama magisterial; sin embargo, la falta de una comunicación oportuna y la presentación de un nuevo modelo educativo para normales abona a la desconfianza entre el gremio.

"El tema de la reforma a las normales es un tema sustancial que no tiene la visibilidad, no se le da la prioridad, la ciudadanía no participa suficiente para decirle al gobierno qué pasó con ese tema", afirma.

En especial, dijo, ante la nueva política de abrir las plazas a otros profesionistas y no solo a normalistas.

"El gobierno está consciente del reto, pero ¿están haciendo lo correcto? No lo sé porque este gobierno no informa", reclamó.

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