¡Lo cacharon en la farsa! Poblano simuló un secuestro

En la investigación del caso, autoridades coincidieron que se trató de un autosecuestro.

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En la entrevista, autoridades descubrieron las contradicciones de Jorge "N", con lo que se determinó el secuestro. (Foto: Contraparte)
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Agencia
CIUDAD DE MÉXICO.- Un joven de 24 años de edad llamado Jorge Arturo "N" fingió ser víctima de un secuestro con el objetivo de conseguir una recompensa de cuatro millones de pesos, suma que aportaría la familia de su esposa.

El joven salió de su domicilio el martes 28 de noviembre a bordo de su vehículo de lujo, un Camaro amarillo y negro. Minutos después, su familia ya no supo de su paradero, informó Milenio. 

Jorge Arturo les dijo que iba a vender su automóvil deportivo a un sujeto que lo contactó vía Facebook, sin que su familia supiera más detalles sobre el presunto comprador.

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Al mediodía, cuando sus familiares intentaron llamarle, Jorge ya no respondió su celular por lo que después de unas horas se inició una campaña en redes sociales para dar con su paradero. 

Cerca de las 07:00 horas de este miércoles, el Camaro en el que viajaba fue ubicado en la carretera a Cuautinchan, a la altura de la desviación a Africam Safari, por lo que fue asegurado y quedó a disposición del Ministerio Público.

Por la tarde, el joven apareció en el municipio de Amozoc, Puebla, y dio la versión de que supuestamente había escapado de sus captores. Al iniciar una investigación, la Fiscalía General del Estado informó que la supuesta víctima compareció ante la Fiscalía de Secuestro y Delitos de Alto Impacto (FISDAI) para denunciar un aparente secuestro.

Jorge narró que había logrado escapar de sus supuestos captores en las inmediaciones de la colonia San Mateo Mendizábal, del municipio de Amozoc, a unos minutos de la capital. Aseguró que estuvo privado de su libertad en dos casas de seguridad, entre ellas una en Lomas de Angelópolis.

Fueron policías municipales quienes auxiliaron a Jorge cuando lo vieron corriendo por la calle. Llevaba en el cuello una cadena amarrada con un candado. Ante las autoridades, el joven cayó en contradicciones de la forma en que se realizó el secuestro y la FGE detectó que estaba fingiendo.

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