Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- Un niño de siete años fue asesinado a puñaladas presuntamente por su padre en Zitácuaro, Michoacán, el hombre luego se roció con gasolina y se prendió fuego, según informó el sitio web de Excelsior.

El hombre sobrevivió y se encuentra hospitalizado con quemaduras en el 50 por ciento de su cuerpo; está en calidad de detenido.

Los acontecimientos se registraron este domingo, cuando vecinos del lugar solicitaron el apoyo de la policía, ya que encontraron el cuerpo del niño en una brecha .

Al parecer, el padre del niño lo llevó a comprar útiles escolares el sábado por la tarde, pero al dirigirse a su casa pasaron por una gasolinera, donde el inculpado compró el combustible y luego se enfilaron rumbo a su hogar.

No se supo qué sucedió, sino hasta el día siguiente cuando lugareños encontraron el cadáver del menor.

El personal de la Unidad Especializada en la Escena del Crimen (UEEC), adscrito a la Fiscalía Regional de Justicia de Zitácuaro se movilizó de manera inmediata y emprendió las pesquisas respectivas.

Fue así que se conoció que el niño respondía en vida al nombre de Leonardo. Tenía una lesión cortante en el cuello. A su lado quedó tirada su mochila de color azul y una botella de agua que contenía combustible.

Mientras tanto, el padre del menor, de nombre Joel “N”, de 35 años, fue localizado con una herida de arma blanca en el abdomen y con quemaduras de segundo grado en el 50 por ciento de su cuerpo, las cuales se provocó él mismo ya que se prendió fuego rociándose gasolina.

Joel fue internado a un hospital local con guardia policiaca y es señalado como el homicida de su hijo, a quien versiones de unos testigos presuntamente trató de quemar después de que el niño fue privado de la vida.

El imputado está separado de su esposa y personas allegadas a él ya que supuestamente es un hombre adicto a las drogas.

(Con información de lavozdemichoacan.com)