El 23 de julio se estrenó en Cancún, Humedal, obra de danza contemporánea que, a través del movimiento, refleja las emociones de mujeres de diferentes procedencias, fisonomías, carreras y edades, en proceso de evolución.

La pieza transmite la idea central de que es en nuestro interior donde encontraremos la capacidad de superación, transformación y adaptación.

Humedal sorprende desde sus primeros minutos: dos de las bailarinas, entran en escena caracterizadas en tonos oscuros con las caras ocultas por las máscaras elaboradas por el artista plástico José Rocha. Simulan el ego. Tras unos minutos en los que ambas se desplazan ágilmente de lado a lado, rodando a ras de suelo con movimientos reptilianos, atrapan a una de las protagonistas que, junto con las otras bailarinas, acaba cautiva mientras que “las egas” tejen sobre el grupo una red que las envuelve y atrapa.

Poco a poco, las bailarinas cautivas, vestidas íntegramente de blanco y con maquillaje y pintura en sus cuerpos del mismo color, van reviviendo y logran desenredarse y librarse de la maraña de hilos que les cubre.

Desde ese momento, una sucesión de coreografías de la joven y talentosa Agustina Suárez Adrover, con distintos ritmos y estilos (recorriendo movimientos de diferente naturaleza: unos que recuerdan la danza africana, otros al folclor mexicano…) en una combinación ganadora con la complicidad de la excelente composición musical de Gastón Artigas, mantienen la tensión de la trama de Humedal hasta el último minuto.

El elenco de la obra está a la altura. Formado por una composición de bailarinas donde reina la diversidad (diferentes fisonomías, procedencias, edades, raíces y profesiones), se palpa un denominador común que da cohesión al grupo: la pasión por las artes.

Las que son actrices sorprenden con su expresividad y complementan sus movimientos con una gran capacidad de transmisión a través de textos que leen e interpretaron junto a sus compañeras. Las bailarinas de diferentes estilos enriquecen la composición con una singularidad propia. El conjunto del grupo, representa mediante sus cuerpos la metáfora del humedal como un sistema vivo, en evolución, con capacidad para regenerarse y salvarse a sí mismo.

Oscar López está a cargo de un impecable trabajo de iluminación y ambientación, que crea unas atmósferas que enmarcan los movimientos, sonidos y diferentes situaciones por las que transita Humedal durante los 45 minutos que dura la representación.

Al finalizar el estreno, se llamó al escenario a las mujeres que han formado parte del programa MAR (Mujer Arte y Resiliencia). MAR es un proyecto de la Fundación Danxica, que a través de una combinación de terapias, ofrece apoyo a mujeres en situación de vulnerabilidad.

Humedal es, de alguna manera, la expresión artística de lo que sucede en MAR, y así se quiso rendir homenaje a sus destinatarias. Al acabar la función de presentación, en el hall del Auditorio STOA (que también fue un descubrimiento para muchos de los asistentes), Casa Diseño Nawala expuso una muestra “SORORIDAD” arte y diseño gráfico, donde una representación de sus componentes ejecutaba en vivo alguna de sus composiciones.

Cancunenses disfrutan de la danza contemporánea 

La noche del estreno se prolongó en el vestíbulo del auditorio donde se escuchaba a un público variado:

• Representantes de la vida cultural de Quintana Roo
• Miembros de la sociedad Cancunense
• Mujeres
• Hombres
• Adolescentes

Todos coincidían en la calidad de la pieza y se interesaban por las próximas representaciones.

No es habitual poder ver danza contemporánea en Cancún. Para algunos, el estreno de Humedal ha significado la oportunidad de poder disfrutar por primera vez este tipo de expresión artística. El éxito de la experiencia deja la puerta abierta a futuras posibilidades.

Es probable que Humedal continue con sus presentaciones en Cancún, es imperdible si esta ocasión no viviste la experiencia, te recomiendo separar espacio de vida para poder sentir la experiencia .