Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- El jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa, entregó al papa Francisco la Llave de la Ciudad de México, así como la medalla y pergamino que lo reconocen como huésped distinguido, en una ceremonia que se llevó a cabo en el Zócalo capitalino.

Ningún Sumo Pontífice de la Iglesia católica había estado aquí, es un honor que sea el papa Francisco, señaló el mandatario.

El Ejecutivo local otorgó al Sumo Pontífice las condecoraciones como muestra de la hospitalidad de los capitalinos.

Después de salir de Palacio Nacional, Francisco recorrió la explanada del Zócalo para saludar a miles de personas a bordo del papamóvil, quienes pudieron seguir el trayecto del jerarca desde su salida de la Nunciatura Apostólica, en el sur de la ciudad, hasta la llegada, alrededor de las 9:30 horas, al Zócalo de la Ciudad de México, mediante las pantallas que fueron instaladas en la explanada.

El mandatario capitalino lo recibió frente a la Catedral Metropolitana. Ambos caminaron hacia un escenario adornado con follaje verde y las banderas de México junto con la del Vaticano y, en el otro extremo, la de la Ciudad de México.

El Pontífice agradeció la distinción y le entregó al jefe de Gobierno una medalla, se estrecharon la mano y bajaron del templete por una rampa trasera, cruzaron el atrio de la Catedral Metropolitana e ingresaron a este recinto religioso. La llave de la Ciudad de México es de plata. Pesa 280 gramos y al anverso tiene grabado el escudo de armas de la CDMX y, en la parte del reverso, el nombre de Su Santidad, papa Francisco, 2016.

La medalla entregada al Pontífice está acuñada en una cara en plata, con un peso de 185 gramos. Mide 52 milímetros de diámetro y 60 milímetros de ancho.

También tiene grabados el escudo de armas de la Ciudad de México y el nombre del Papa.

El pergamino se elaboró en papel artesanal de 34 centímetros de altura por 21.5 centímetros de ancho, con un peso de 25 gramos.

La llave, medalla y pergamino para la declaratoria de huésped distinguido se otorgan a presidentes, jefes de Estado y ministros, como muestra de amistad.

Distinción

Como cortesía, el Papa entregó una medalla a Miguel Ángel Mancera.

En su reunión con el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, el papa Francisco le entregó una medalla de plata conmemorativa de su viaje apostólico.

La medalla tiene grabado el escudo del Vaticano y, al otro lado, una República mexicana con la imagen de la Virgen de Guadalupe y la leyenda “Viaje apostólico de Su Santidad Francisco a México.

El jefe de gobierno capitalino, a su vez, entregó al Pontífice la llave de la Ciudad de México. El Papa bromeó sobre si la llave, que le fue entregada como huésped distinguido, podía abrir absolutamente todo en la capital.

“Le dijimos que era una llave maestra y podía abrir lo que quisiera de la Ciudad de México”, dijo al respecto Mancera.