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LONDRES.- La paramédica Natalie Kunicki se encontraba acostada viendo una película luego cuando se estiró un poco y escuchó un crujido dentro de su cuerpo; cuando quiso levantarse se percató de que le resultaba difícil moverse.

En un primer momento la joven de 23 años decidió no llamar a emergencias. Luego de que su situación se prolongó durante varios minutos más, decidió finalmente llamar al médico, informó Tribuna. 

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Al llegar a un hospital de Londres, los médicos la revisaron y le informaron que, debido a su estiramiento, una arteria en el cuellose le había reventado, lo que le ocasionó un coágulo de sangre en el cerebro. 

"Ni siquiera estaba tratando de romper mi cuello. Estiré mi cuello y sólo pude escuchar este 'crack, crack, crack"", relató.

"Soy paramédica y no llamé al 999 durante 10 minutos porque pensé que era improbable que fuera un derrame cerebral; debía haberlo sabido", remató.