Exigen personas adictas a drogas tratamientos de salud

Debemos dejar de usar drogas para acceder a tratamientos, violan nuestros derechos, indicaron.

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Nadie merece morir por su condición de uso de drogas, indicó el colectivo.
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Ricardo Israel Sánchez Becerra
Agencia Reforma
Ciudad de México.- Este martes, manifestantes pidieron al gobierno federal acciones para que las personas que utilizan drogas inyectadas tengan acceso a servicios de salud. 

Para garantizar que personas usuarias de drogas inyectadas en México tengan acceso a tratamientos de salud contra VIH, hepatitis C o tuberculosis, es necesario por parte del Estado establecer una Estrategia Nacional de Reducción de Daños.

Tal fue la exigencia que hicieron miembros de la Red Mexicana de Reducción de Daños (Redumex) este martes al Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, durante la edición 10 de la Conferencia Internacional de la Sociedad del Sida Sobre la Ciencia del VIH (IAS 2019, por sus siglas en inglés).

"Las personas que se inyectan drogas en México son la población más rezagada en términos de acceso a tratamiento, a diagnóstico y a cuidados", manifestó Angélica Ospina al irrumpir junto con sus compañeros en la conferencia en la que participó López-Gatell.

"Nos exigen dejar de usar drogas para poder acceder a tratamiento de salud lo cual constituye una grave violación de los derechos humanos".

De acuerdo con los manifestantes de Redumex, colectivo que congrega organizaciones civiles, activistas, académicos, usuarios y ex usuarios de drogas inyectadas, dicha Estrategia debe contemplar un plan comunitario de distribución de medicamentos, un compromiso real para abatir la violencia de género, y tratamiento integral contra tuberculosis, hepatitis C y VIH.

"En Tijuana, seis de cada diez personas que se inyectan drogas, y que mueren por VIH, mueren por el binomio tuberculosis-Sida, y nadie merece morir por su condición de uso de drogas.

"Y las mujeres que se inyectan drogas, en particular, son violadas constantemente y no hay ningún servicio de apoyo a esta población. A través de la violencia sexual se infectan de VIH, un elemento que marca sus vidas y agudiza su condición de abuso problemático", lamentó Ospina.

El Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud respondió a los manifestantes que la forma en la que la actual Administración atenderá a esta población en particular es a través de la Estrategia Nacional de Prevención de Adicciones, presentada públicamente el pasado 5 de julio.

La clave, aseguró, es que ésta no está basada en un enfoque prohibicionista con acciones policíacas y militares, como tradicionalmente se ha abordado la problemática en México.

"El uso de drogas, la demanda de sustancias psicoactivas o el abuso y la adicción son asuntos de salud pública, son asuntos de bienestar; no se resuelven con balas y represión. Lo que requiere es inclusión, lo que requiere es reconstrucción del tejido social, y lo que requiere es atención, oportunidades, particularmente para los jóvenes, para las niñas y niños.

"Las mujeres que usan drogas inyectadas requieren servicios de atención prenatal. Hay esterilizaciones forzadas en México para las mujeres que usan drogas. Las mujeres que usamos drogas tenemos derecho a la maternidad, el Estado tiene que garantizar que nuestros hijos puedan nacer sanos aún si vivimos con VIH", expuso Ospina.

Finalmente, aunque Brenda Crabtree, investigadora del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, y directora científica local de la IAS 2019, aseguró que este encuentro internacional siempre está abierto al activismo, los manifestantes reclamaron que es muy difícil que su población tenga voz y representación en el mismo.

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