'Alquilar nuestros vientres es el negocio familiar '

Aseguran que continuarán haciéndolo hasta que el cuerpo se los permita. Obtienen por cada bebé unos 250 mil pesos.

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Milagros, de 30 años, fue la primera en rentar su vientre por motivos económicos. Al ver la ganancia, sus hermanas Martha, María y Paulina, también decidieron entrar al negocio. (dailymail.co.uk)
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Agencias
VILLAHERMOSA, Tabasco.- Desde que Europa prohibió la subrogación de útero, en México esta industria está en auge en los sectores más pobres del país, según el diario británico 'Daily Mail'.

Ese medio de comunicación ha realizado una entrevista con cuatro hermanas residentes en el estado de Tabasco, quienes obtienen hasta unos 14 mil dólares al año (más de 250 mil pesos mexicanos) cada una por dar a luz bebés que luego serán entregados a parejas homosexuales europeas.

"Alquilar nuestros vientres es el negocio familiar (…) Nuestros vecinos nos acusan de dirigir una red de tráfico infantil", lamenta Martha Hernández, una de las entrevistadas, quien se encuentra en el cuarto mes de embarazo de un bebé 'comprado' por una pareja homosexual francesa.

"Que así sea"

"Pero solo somos madres solteras que nos preocupamos de nuestro propio futuro", aseguran las hermanas Hernández. Milagros, la mayor de ellas, fue la primera de esa familia en entrar en el mundo  de la subrogación gestacional en el 2013.

"Si eso significa alquilar nuestros vientres para traer dinero para mantener a la familia, que así sea", dice Milagros, de 30 años de edad y madre tres hijos propios, quien obtuvo una paga de 16 mil dólares (288 mil pesos aproximadamente) en su primera experiencia de subrogación. 

Al ver lo lucrativo del negocio, sus otras tres hermanas también decidieron seguir los mismos pasos: Martha de 30 años, María de 27, y Paulina, de 22 años de edad.

Existen tres tipos de subrogación: en donde la pareja que contrata aporta óvulo y espermatozoide y la madre sustituta recibe el embrión en su útero con la finalidad de llevar la gestación y el nacimiento; cuando la madre portadora aporta su óvulo, el cual podrá ser inseminado con el esperma de la pareja que contrata o de un tercero anónimo o conocido; y donde el material genético es aportado por individuos ajenos a la pareja contratante y la madre portadora cede su útero.

Las protagonistas de esta historia comentaron al portal británico que en promedio obtienen una rentabilidad de 14 mil dólares (252 mil pesos) por 'alquilar su vientre', aparte de que cuentan con todos los gastos de manutención pagados por el cliente durante todo el embarazo, y lo que hace esta industria esté creciendo.

La cruda realidad

Incluso Lourdes, de 81 años, y abuela de las hermanas, asegura que si pudiera alquilaría su vientre, por lo que alienta a sus nietas a acumular tantos embarazos subrogados como sea posible antes de que cumplan 35 años, edad después de la cual la fertilidad empieza a descender.

A pesar de lo lucrativo que puede parecer este negocio, la realidad es dura para estas mujeres, porque afirman que tras dar a luz a los bebés es difícil entregarlos a sus clientes debido al fuerte lazo que les une, a pesar de "no tener ninguna relación genética" con los menores.

"Desde el principio se sabe que nos van a quitar el bebé, y por lo tanto trato de separar mis sentimientos de la realidad, pero al final es muy difícil", comenta Martha, por lo que trata de "derramar todo el amor" en sus otros dos hijos para tratar de olvidar al bebé 'contratado' que llevó nueve meses en su vientre.

"Durante el tiempo que pueda"

Pero las hermanas Hernández creen que lo que van a ganar es mucho más de lo que van a perder. 
No obstante, "lo que estas mujeres ganan es solo una pequeña parte en una industria que mueve más de 130 millones de dólares al año solo en el estado de Tabasco. La mayor parte de esa cantidad se queda en las agencias que cobran por sus servicios, mientras que las mujeres que prestan sus vientres reciben unos 14 mil dólares", indica 'Daily Mail'.

"Voy a seguir compartiendo mi vientre durante el tiempo que pueda. Estoy sacrificando mi propio cuerpo para asegurar un futuro en un país donde nada es fácil", admite Milagros, quien ya ha tenido dos embarazos subrogados y ya está pensando en su próximo cliente, con quien espera reunirse después los primeros meses del año siguiente, seis meses después de dar a luz en octubre.

Puede consultar el artículo completo, en idioma inglés, dando clic aquí.

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