México cierra un año teñido de corrupción

Caso Ayotzinapa, la adquisición de millonarias casas, y los escándalos de varios políticos hacen de 2014 un año para olvidar.

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Agencias
MÉXICO, DF.- México termina un año teñido por una sucesión de casos sospechosos de corrupción, un fenómeno convertido en uno de los principales componentes de la crisis política y social agudizada por la desaparición de 43 estudiantes en septiembre pasado.

La serie de escándalos salpicó a todos los partidos, incluida la oposición, pero también a poderosos empresarios, así como a alcaldes, asambleístas, gobernadores y hasta tocó al propio presidente de la República.

El caso más reciente ocurrió la semana pasada e involucró al delegado de Iztapalapa, una de las zonas más pobladas del país, Jesús Valencia, del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Valencia sufrió una colisión al sur de la urbe cuando aparentemente iba manejando en estado de ebridad, durante la madrugada.

El incidente desató una controversia porque iba a bordo de una lujosa furgoneta propiedad de una empresa que recibió contratos del Gobierno.

A este caso se suma el del asambleísta del Distrito Federal Edgar Borja, quien debió pedir una licencia indefinida para ser investigado luego que un diario local publicó el 18 de noviembre una grabación donde negocia un contrato de digitalización de documentos, captura de datos y archivos a cambio de jugosas comisiones.

Pero ambos episodios palidecen frente al denunciado a principios de noviembre, cuando la periodista Carmen Aristegui reveló que la esposa del presidente Enrique Peña adquirió una casa de siete millones de dólares al inicio de la gestión de su esposo, dos años atrás.

La corrupción obligó al Gobierno a formar una iniciativa de ley para combatirla, pero los diputados ni siquiera la discutieron

La lujosa mansión, ubicada en una de las zonas más exclusivas de la metrópoli, fue vendida a crédito por el empresario Armando Hinojosa, del Grupo Higa, contratista del gobierno, a un precio de sólo cuatro millones aunque vale al menos siete.

Hinojosa resultó ser socio de un grupo de empresas que ganó la licitación de un proyecto para construir un tren rápido de la capital a la vecina ciudad de Querétaro, por cuatro mil 300 millones de dólares.

El contrato fue cancelado en noviembre por irregularidades. También este mes salió a la luz que el ministro de Hacienda (Finanzas), Luis Videgaray, uno de los hombres más cercanos a Peña, adquirió del mismo empresario otra lujosa casa de campo por unos 400 mil dólares en cuotas, en un club de golf en Malinalco, una zona boscosa a unos 80 kilómetros de la capital.

Otro caso notorio de presunta corrupción fue protagonizado por el gobernador del estado de Chihuahua, César Duarte, del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), a quien senadores de oposición exigieron investigar el mes pasado por enriquecimiento ilícito después de que compró unos 4.5 millones de dólares en acciones del Banco Progreso Chihuahua.

En esta cadena de escándalos no quedaron al margen empresarios y banqueros como Rafael Olvera, de Ficrea, una sociedad financiera intervenida en noviembre por el gobierno bajo la sospecha de lavado de dinero, tras estafar a cientos de ahorristas a quienes se atraía con tasas de interés dos y hasta tres veces más altas que las promedio en el mercado.

La entidad aparentemente funcionaba bajo un "esquema Ponzi" hasta que la burbuja reventó y en cierto momento dejó de pagar los réditos a sus clientes, que en estos días iniciaron una ola de protestas callejeras para exigir la devolución de su dinero.

El único empresario detenido por corrupción en octubre pasado fue Amado Yáñez, dueño de la empresa Oceanografía, expropietario del club de fútbol Querétaro, quien defraudó a Banamex -filial del gigante financiero estadounidense Citigroup- por 585 millones de dólares al presentar facturas apócrifas de cuentas por cobrar de Petróleos Mexicanos (Pemex).

El diario británico The Financial Times publicó el pasado 27 de octubre que el gobierno del presidente Peña no ha podido cambiar al "México viejo, donde las autoridades locales son ineptas, corruptas, o están en connivencia con el crimen organizado".

Según un estudio del Banco Mundial, la corrupción en México representa cerca del nueve por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

Frente a la avalancha de escándalos, el Congreso comenzó a discutir hace unas semanas la creación de una Fiscalía y un Sistema Nacional Anticorrupción, pero el pasado 12 de diciembre los diputados anunciaron que se irían de vacaciones sin aprobarlo ante la falta de acuerdos entre las principales fuerzas políticas.

(Información de Ansa Latina)

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