Jannet López/Fernando Damián/Milenio
CIUDAD DE MÉXICO.- En el que Aurelio Nuño calificó como el "año clave" de la reforma educativa, la Secretaría de Educación Pública (SEP) inició una auditoría para detectar y erradicar a los aviadores de la nómina magisterial.

En entrevista con Carlos Marín para El asalto a la razón, Nuño consideró necesaria la medida porque, irónicamente, hay escuelas donde la plantilla de docentes no está completa a pesar de que en los registros aparezca lo contrario.

“Estamos haciendo una auditoría a la nómina magisterial, yendo escuela por escuela para saber a cuántos maestros estamos pagando y cuántos están allí; al terminar daremos los resultados y actuaremos”, advirtió.

Esta, dijo, es solo una de las medidas administrativas de la reforma educativa, como lo fue la que permitió detectar a dos mil 200 maestros designados como comisionados sindicales cuyo sueldo salía de recursos del gobierno y no de fondos de su organización.

Respecto al nuevo modelo educativo, que se presentará el 13 de marzo, adelantó que uno de los puntos más importantes es que 80 por ciento de las materias serán obligatorias a escala nacional y el porcentaje restante quedará a criterio de los estados y las escuelas.

Como parte de los planes de la reforma, la SEP creará un sistema de “becas a futuro”, con el fin de que los apoyos “sigan” a estudiantes hasta que concluyan sus estudios.

Al año se entregan ocho millones de becas, con una inversión 40 mil millones de pesos y “muchas llegan a quien más lo necesita, pero no necesariamente todas”.

El nuevo modelo arrancará en el ciclo escolar 2018-2019, con el fin de que los niños “dejen de memorizar y aprendan a aprender”.

Antes, detalló que se trata de “una versión enriquecida” que mantendrá los cinco capítulos: desarrollo curricular y pedagógico, escuelas, profesionalización de los docentes, equidad e inclusión y gobernanza educativa.

El modelo, cuya presentación encabezará el presidente Enrique Peña Nieto, incluirá un segundo documento que contiene la ruta de su implementación y los tiempos en que dará resultados; para su aplicación se publicarán los nuevos planes de estudio, libros de texto y capacitarán a un millón 200 mil maestros.

Cuestionado sobre si el sistema educativo tiene potencial para recibir a los deportados, dijo que tiene “capacidad de sobra. El sistema educativo tiene esa capacidad, incluso si pasaran a seis mil a 10 mil, se pueden distribuir a diversas universidades”.

Adelantó que presentarán un programa para la incorporación de migrantes al INEA, pues la mitad de los repatriados no ha concluido la educación básica.

Recorte a la cobertura

La Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies) reconoció la limitación de recursos para atender a los jóvenes repatriados, pero aseguró que bajo ninguna circunstancia dejará de recibir a los dreamers.

Según dijo el director general de Planeación y Desarrollo de la asociación, José Aguirre, el presupuesto destinado a la operación regular de las universidades se mantuvo sin reducciones para este año, pero los recursos para ampliación de cobertura y mejora continua sufrieron, en cambio, un recorte considerable.