Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- Las solicitudes de asilo en México aumentaron diez veces este año en comparación con 2011 mayormente de migrantes centroamericanos que buscaban llegar a Estados Unidos pero decidieron quedarse en este país, según un informe de Naciones Unidas.

George Okoth-Obbo, funcionario del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), señaló que 'hemos tenido cinco veces la gente que se movía desde 2012 que acaban en México como parte de un movimiento que va hasta Estados Unidos', informa la agencia Ansa Latina.

Durante una visita a un refugio de inmigrantes, el funcionario indicó que este año unas 10 mil personas aplicaron para la solicitud de refugio en la región centroamericana, pero en México hubo 7 mil, es decir, la mayoría, diez veces más que hace cinco años.

Okoth-Obbo, que es de origen ugandés, señaló que el gran flujo migratorio desde Centroamérica hasta México obedece a los altos niveles de violencia derivada de la actuación de pandillas en Honduras y El Salvador, que 'pone en riesgo la seguridad de mujeres y hombres adolescentes'.

Si bien parecería que el 'sueño americano' es un poderoso imán que atrae a los migrantes centroamericanos, en realidad hay muchos que desean quedarse en México pues sólo buscan seguridad.

Ante ello, consideró que el gobierno mexicano requiere 'más capacidad' de respuesta a las solicitudes de refugio.

Condiciones de encierro

Asimismo, estimó que las autoridades mexicanas requieren 'ajustar sus criterios para la deportación, a fin de garantizar la protección cuya integridad peligraría de volver a su país de origen'.

El funcionario estimó que los migrantes que buscan cobijo enfrentan problemas de acceso a la salud, albergues seguros y no hay personal suficiente para atenderlos en los refugios.

El Comisionado Asistente de Operaciones de Acnur, que realizó previamente una gira por Honduras y Nicaragua, denunció que migrantes vulnerables como niños, adolescentes y madres enfrentan condiciones de encierro difíciles en las estaciones migratorias.

'Las condiciones de detención son muy duras, con espacio limitado para que los niños puedan moverse y expresarse', señaló.

Para el funcionario, la detención de niños y adolescentes 'debe evitarse', aunque reconoció que autoridades aztecas trabajan para buscar medidas alternativas.