'Si Colosio viera al PRI, se volvería a morir'

El hijo del difunto candidato aseguró que si el PRI cae es porque, probablemente, así se lo ganó.

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Luis Donaldo Colosio Riojas, actualmente es abogado y director de la empresa Komenko. (Milenio Digital)
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Fernando del Collado/Tragaluz
CIUDAD DE MÉXICO.- El 23 de marzo de 1994, mientras realizaba su campaña en la colonia Lomas Taurinas, de Tijuana, Luis Donaldo Colosio recibió un balazo en la cabeza y otro en el abdomen

Vuelve marzo. Han pasado 23 años. A ver quién le puede sostener la mirada sin advertir de fortalezas e integridad. Solo emprendedores.

En está ocasión, Luis Donaldo Colosio Riojas, hijo del excandidato, dio a conocer varios detalles sobre lo que ha sido su desarrollo tras perder a su padre hace más de dos décadas.

¿Cómo estamos?

¡Muy bien, gracias!

¿Con ánimos?

Bastante.

¿Construyendo su propia reputación?

De eso se trata.

¿Su propia voz?

Es lo importante. De lo contrario, sería un espectro de alguien más.

¿Impulsando liderazgos?

Es lo que trato de hacer.

¿Qué es eso de Komenko?

Una plataforma virtual de servicios jurídicos a la comunidad emprendedora. Queremos promover la cultura de la legalidad en los negocios.

Déjenos detenernos, ¿qué son los treinta?

Una etapa interesante, porque se van consolidando muchas cosas.

¿El tiempo es implacable?

El tiempo es una de las únicas fuerzas que son indomables.

¿Crecer duele?

Crecer duele, pero sufrir es opcional.

¿Hay que ser fuertes?

Sí, por supuesto.

¿Lo pasado ha huido?

Está ahí y ese es un hecho. Se aprende de él, pero ya no se sufre.

¿Este presente es suyo?

¡Es completamente mío!

¿Este presente está en libertad?

Tiene ciertas ataduras, pero son aquellas que decidí conservar.

Vuelve marzo…

¿Los "idus de marzo"?

Como cada año.

Hace un año ofreció la conferencia “La esperanza del mexicano”, ¿la hay?

Por supuesto que sí.

¿Qué país es este, Luis Donaldo?

Es el que nos hemos forjado. Somos, a veces, un poco irresponsables por no aceptar la carga de culpa que tenemos como pueblo, como sociedad.

¿Cómo debemos leerlo?

Todo lo que nos está ocurriendo hoy es una fuerte llamada de atención para que realmente despertemos a una activación de la ciudadanía.

¿Qué ciudadanos se requieren?

Se requiere un ciudadano que sea respetuoso, solidario y responsable.

¿Es posible un liderazgo desde la ciudadanía?

Sí. De hecho, es el liderazgo más importante y necesitado en este momento.

¿El liderazgo de "El Bronco" es uno de ellos?

Creo que la gente necesitaba ver un ejemplo así.

¿Ha fracasado?

No se puede decir victoria o fracaso. Estamos apenas en el segundo año de su gobierno.

¿Qué debe pasar con Rodrigo Medina?

Debe ser la ley la que ponga en su lugar a quien tenga que poner en su lugar.

¿Qué valor tiene para un líder la honestidad?

Todo. Podrá tener las razones que sea para no ser honesto, pero terminará mal.

Vuelve el 23 de marzo…

23 años después…

Así es.

¿Se han resuelto todas la dudas?

No, pero ya muchas no incomodan.

¿Qué mentiras quedan?

La mentira más grande es que una sola persona, incluso Luis Donaldo Colosio, iba a resolver todos los problemas del país. Una mentira. Que se desengañen.

¿Qué traiciones permanecen?

Las que hay al interior de esos equipos de trabajo en donde se confabuló todo lo que sucedió. Entre ellos debe de ser una tortura trabajar todos los días.

¿Hay perdón?

Por supuesto: ¡que diosito me los bendiga a todos!

¿Se puede perdonar sin olvidar?

Sí. Una cosa es perdonar y otra que no me acuerde qué paso.

A sus 18 años escribió que lo veíamos con “amabilidad cariñosa”, ¿lo seguimos viendo así?

¡Espero!

¿Los mexicanos le exigimos mucho?

Muchos tienen una expectativa donde me exigen perseguir una profesión y un estilo de vida completamente distinto al que a mí me interesó y al que me he dedicado.

“Veo un México con hambre y sed de justicia”…

Sí, pero más que esa frase, recordaría que el mundo no nos fue heredado por nuestros padres, nos fue prestado por nuestros hijos. Hay que hacerles justicia a ellos.

¿Debemos bajar a su padre del pedestal?

Me encanta que sea una referencia de inspiración, de congruencia. Ese es el único pedestal que me interesa que conserve.

Más de 300 calles, decenas de monumentos en su nombre y figura.

Es un orgullo cada vez que los veo.

¿Su veneración está en correspondencia con nuestro sentimiento de culpa?

Nombrar calles y poner estatuas no le hace justicia a lo que estaba tratando de hacer y al movimiento que impulsaba. En todo caso, debería de ser la participación de la gente todos los días por el bien de su país lo que sería el mejor homenaje que pudiera haber.

¿Aclarar su asesinato no es responsabilidad de todos?

Sí lo es. Sin embargo, a estas alturas, quién sabe si algún día se llegue a hacer.

¿Por qué lo mataron?

¡Dime tú!

¿Ha tenido oportunidad de revisar toda la investigación?

En parte, sí.

¿Cuál es la duda más recurrente?

No quiero entrar mucho a detalle, pero digamos que una de las pruebas más importantes y su cadena de custodia… ahí te lo voy a dejar: fue lo que sembró más dudas dentro de todo el asunto.

¿Cuál habrá sido su mayor equivocación?

Quizá, no haber anticipado que esa pudo ser una consecuencia de su candidatura.

Por cierto, ¿seguiría siendo priista?

Estoy seguro que si Luis Donaldo Colosio volviera y viera al PRI de hoy, ¡híjole, de vergüenza se volvería a morir!

Ha dicho que no quiere ser presidente, ¿lo confirma?

Confirmo que yo no tengo ambición de ser presidente.

La pregunta quizá debería ser: ¿qué presidente esperaría?

Necesito un presidente congruente, que lejos de hacerse un nombre o un imperio, se levante y vea a su país. Que le ofenda la brecha que hay entre los dos Méxicos.

¿Qué atributos ha de tener?

Una persona responsable, trabajadora, honesta, que sea incluyente.

¿Una mujer presidenta?

¿Por qué no?

¿Sí a las coaliciones?

Claro.

¿Algo le atrae del poder?

Las posibilidades para hacer las cosas.

¿Para transformar las cosas?

Invariablemente, toda voluntad de servicio debe de ir por una búsqueda del poder.

Otra vez marzo…

Así es.

¿Qué permanece?

Una cicatriz, un recordatorio de que ese gran sacrificio que hizo mi padre, hace 23 años… no quiero decir que ha sido en vano, pero le quedan a deber. Le quedamos a deber.

¿Aún conserva su vieja pluma café sepia?

Tengo muchas de esas todavía.

¿Y el cuadro en su cuarto?

¿El del pescador? Ese lo tengo justo en mi oficina. Mi papá me enseñó sobre el valor de la paciencia y la perseverancia inventando un cuento nada más viendo ese cuadro. Pienso algún día contarle la misma historia a mis hijos.

¿Cuál es el sueño más recurrente?

Ver a mis hijos realizados.

¿La imagen más perdurable?

La sonrisa de mi madre.

Ahora mismo, si aquí estuviera, ¿qué le diría a su padre?

Tengo tantas dudas, tantas cosas que me gustaría preguntarle sobre lo que él vivió justo a mi edad o sobre lo profesional, familiar, personal… de esas charlas, como él solía llamarlas, de hombre a hombre que solíamos tener cuando yo tenía 3 años.

¿Le diría que valió la pena haber sacrificado su vida por la política?

No sacrificó su vida por la política, sacrificó su vida por el país. Eso duele.

¿Con este estado de cosas, entraría a la política por sus hijos?

¡Por mis hijos haría todo!

Por cierto, ¿cómo ve a los líderes del PRI decir que la corrupción no los manchará?

¡Ojalá, buena suerte!

¿Qué es el cinismo?

El cinismo es poder vivir con la mentira con plena tranquilidad.

¿Cómo el PRI?

Como algunos priistas.

A propósito, ¿cuántos partidos lo han buscado?

Varios.

¿Con cuál se queda?

Con todos.

¿Ha valorado su nombre y capital político?

Sí.

¿Le sirve de algo?

Pesa más de lo que sirve.

Vuelve marzo...

Así es.

El PRI cumple 88 años, ¿qué han hecho con el partido?

Han hecho y deshecho.

¿Ve su caída?

Es cíclico. Si el PRI cae es porque, probablemente, así se lo ganó.

¿Cree, como Peña, que la corrupción es propia de nuestra cultura?

Creo que culturalmente tenemos enraizado un espíritu proclive a la corrupción, pero el escudarse diciendo: ‘es cultural, no hay nada que podamos hacer’, es también una actitud a medias.

¿Cree, como Trump, que los mexicanos somos criminales?

La criminalidad no tiene que ver con la etnia.

¿Violentos?

No tiene que ver con la etnia.

¿Somos machistas?

¡Eso sí!

¿Cómo debemos responder frente a la confrontación?

Con tranquilidad. Las reacciones violentas no rinden buenos resultados.

¿Lo está enfrentando bien nuestro presidente?

No ha sido del todo desastroso, pero sí ha faltado mucho tacto para saber a qué sí responder, a qué no responder y cómo responder.

¿Cómo manejamos los odios?

El odio no cabe. Se tiene que eliminar porque es sumamente destructivo.

¿Sabe que Aburto podría obtener su libertad en dos años?

Leí la noticia. Pues si el sistema de justicia dice que ya ha saldado su condena… eso no depende de mí.

¿La impunidad también es parte de nuestra cultura?

Es una triste realidad de México que corrupción e impunidad siempre van de la mano. Nos ha hecho mucho daño.

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