Luis Fuente/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- La pareja encontrada muerta en una bodega de Ticul, el domingo pasado, falleció por intoxicación por monóxido de carbono, pues estaban en el interior del vehículo y en un sitio cerrado con el motor encendido, informó la Fiscalía General del Estado.

La dependencia indicó que no se encontraron huellas de violencia en los cadáveres de estos dos jóvenes.

Especialistas del Servicio Médico Forense (Semefo) efectuaron la necropsia correspondiente a las dos personas fallecidas que determinó que la causa de su fallecimiento se debió a una aguda intoxicación por monóxido de carbono.

Él de 29 años, ella de 17

Los cuerpos encontrados la mañana del domingo en el interior de una bodega ubicada en la calle 15 entre 26 y 28 de la colonia Mejorada de Ticul, fueron identificados por personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) como Marco Antonio González Azarcoya. de 29 años y una joven de 17 años, que por ser menor de edad nos reservamos el nombre.

Peritos adscritos a la dirección de Servicios Periciales efectuaron las investigaciones correspondientes y se descartó algún tipo de violencia, encontrando únicamente en el lugar un vehículo Ford Mystique, con placas de circulación DFK 92-50 de Campeche, del cual se expulsó el tóxico que acabó con la vida de la pareja.

Tras el hallazgo de los cuerpos por parte de los familiares del ahora occiso, agentes de la Policía Ministerial Investigadora iniciaron las indagatorias que señalan que una noche antes el joven había salido a cenar con la también occisa y posteriormente se trasladaron a la bodega, propiedad de la familia del muchacho, habilitada como una fábrica de calzado.

Encerrados en el auto

En este lugar, la pareja comenzó a ingerir bebidas embriagantes dentro del vehículo que tenía encendido el motor y las ventanillas cerradas por el aire acondicionado.

Al calor de las bebidas embriagantes, la pareja tuvo un encuentro sexual, siempre en el interior del vehículo, lo que aceleró la intoxicación del monóxido de carbono.

A pesar de que la pareja ya estaba mal, logró salir del vehículo, pero solo pudieron avanzar unos pasos y caer en el suelo, donde finalmente fallecieron.

A finales de la década de los 80, sucedió un caso similar en una brecha de la carretera Mérida-Progreso, donde en un automóvil, en malas condiciones mecánicas, una pareja de novios decidió tener relaciones sexuales, y murieron intoxicados por el monóxido de carbono ya que dejaron el motor encendido. En esa ocasión también murió el hermanito de la joven, que dormía en el asiento posterior del automóvil.