MÉRIDA, Yuc.- El Sindicato de Alarifes y Obreros de la Construcción de Yucatán reportó que el primer semestre del 2017 significó un periodo positivo para el sector: de los 345 contratistas afiliados a esta central el 90 por ciento dijo estar ocupado en los ámbitos públicos y privados, en tanto que el diez por ciento restante se avocó a actividades particulares.

El secretario general del sindicato, Bernabé Chan Castañeda, explicó  que cada uno de los 345 contratistas tiene a su cargo 20 alarifes en promedio, y que de cara al cierre del año ven incertidumbre en la actividad económica del sector ante el incremento de los precios de los materiales para construcción como el cemento.

“La demanda ha sido aceptable durante el primer semestre del año, en este momento es positiva por la época de vacaciones con la ejecución de obras en las escuelas, también estamos participando en el programa de autoconstrucción que opera el Instituto de Vivienda del Estado de Yucatán (Ivey), asimismo en el distribuidor vial que se construye en la carretera Mérida-Tizimín”.

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Chan Castañeda agregó que en este momento el salario semanal de un alarife es de mil 800 pesos en promedio; en tanto que otros trabajadores especializados en carpintería y herrería que se desenvuelven en la construcción es de más de dos mil pesos a la semana.

“El sindicato ha tenido ocupado al 90 por ciento de los contratistas continuamente durante este año, no hay ningún problema en cuanto a la colocación de los mismos, aquí lo único que hay que pensar es la incertidumbre de los precios de los materiales para construcción, pero ojalá que la buena racha del inicio de año se mantenga, es bastante buena”.