Alertan sobre uso excesivo de cloro y ácidos en Yucatán

Seduma previene de hundimientos provocados por desgaste de la roca calcárea ante el abuso de solventes usados para la limpieza.

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El uso excesivo de cloro y ácidos, a mediano y largo plazo pudiera acelerar la disolución de la roca calcárea sobre la que se edifica Mérida. (Notimex)
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Agencias
MÉRIDA, Yuc.- El secretario estatal de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Eduardo Batllori Sanpedro, alertó sobre un uso excesivo e inadecuado manejo de cloro y ácidos, lo que a mediano y largo plazo pudiera provocar disoluciones a la roca calcárea sobre la que se ubica esta capital.

El funcionario estatal indicó que en el llamado "segundo anillo de cenotes" es posible que a mediano y largo plazo pudieran darse hundimientos, resultado del proceso de "acidificación que pudiéramos estar ocasionado al manto freático", informa Notimex.

Recordó que por su constitución geológica, el territorio yucateco es similar a un "queso gruyere" y que el verter al subsuelo productos como cloro y ácido muriático "incrementa el poder de disolución de la roca calcárea".

Esto, insistió, tiene mayor posibilidad de suceder en la zona del llamado segundo anillo de cenotes que pasa por Mérida, lo cual también está asociado a las aguas negras y aguas residuales que se vierten sin tratamiento al manto freático.

Dijo que "el uso y abuso de cloro y ácido muriático para efectos de limpieza puede incidir a mediano y largo plazos en la roca que subyace, y la posibilidad de encontrar un cenote debajo de nuestros hogares puede generar circunstancias que hay que tomar en cuenta".

Batllori Sampedro puntualizó que ese segundo anillo "pasa por Chuburná Puerto, entra por Mérida y sale por Telchac Puerto y San Crisanto".
Admitió que se carece de estudios precisos que permitan conocer el estado que guarda la roca en esa extensa zona, pero "hay que estar pendientes a mediano y largo plazo, hablamos de tiempos geológicos, pueden ser 100 o 150 años, puede ser antes, no conocemos lo que hay debajo de nuestro subsuelo".

Consideró que pese a la carencia de investigaciones respecto al tema, es vital que en forma inmediata "se minimice el uso de cloro y ácido muriático, que no los vertamos a los drenajes".

Asimismo, pidió dar tratamiento a las aguas residuales, utilizar biodigestores, no meter pozos de absorción, emplear camas de infiltración o meter jardineras y separar las aguas grises de las negras.

Esas, continuó, pueden ser algunas soluciones para evitar mayores daños al medio ambiente en un futuro.

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