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MÉRIDA, Yucatán.- Con motivo del Día del Padre, que hoy se celebra, el IV Arzobispo de Yucatán, Emilio Carlos Berlie Belaunzarán, envió ayer el siguiente mensaje episcopal dedicado “a todos los que han recibido el don de la paternidad”:

Este domingo celebramos en México a todos los que han recibido el don de la paternidad. A ustedes papás responsables y dedicados, nuestro afecto y bendición.

Efectivamente, ser padre hoy conlleva una gran responsabilidad, comporta sobre todo una vinculación más profunda con el orden moral objetivo, establecido por Dios, cuyo fiel intérprete es la recta conciencia. El ejercicio responsable de la paternidad exige, por tanto, que los cónyuges reconozcan plenamente sus propios deberes para con Dios, para consigo mismo, para con la familia y la sociedad, en una justa jerarquía de valores.

Recientemente en una audiencia pública de los miércoles el Papa Francisco dijo que “si en una familia los padres dicen: subimos sobre esa escalera y los toman de la mano y paso a paso les ayudan a subir, las cosas irán bien. Pero si les dice: ‘Ve allá’ -‘Pero no puedo’– ‘Ve’, esto se llama exasperar a los hijos, pedirles las cosas que no son capaces de hacer. Por esto, la relación entre los padres y los hijos debe ser de una sabiduría, de un equilibrio, muy grande”.

Un buen padre sabe esperar y perdonar, desde lo profundo del corazón. Cierto, sabe también corregir con firmeza: no es un padre débil, complaciente, sentimental. El padre que sabe corregir sin humillar es el mismo que sabe proteger sin limitarse.

La Iglesia, nuestra madre, está comprometida en apoyar con todas sus fuerzas la presencia buena y generosa de los padres en las familias, porque ellos son para las nuevas generaciones custodios y mediadores insustituibles de la fe en la bondad, de la fe en la justicia y de la protección de Dios, como San José.

Que por intercesión de San José, nuestro buen Padre Dios les bendiga en abundancia. Muchas felicidades.