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MÉRIDA, Yuc.- La peligrosidad de Michoacán, que a diario se conoce a través de los medios de comunicación, enlutó las vacaciones de una familia que radica en Mérida y que se encontraba pasando el fin de año en ese estado, considerado como uno de los más violentos de México.

La víctima del criminalidad michoacana fue el abogado Marco Antonio Ugalde Álvarez, quien hace unos tres años llegó a radicar a Mérida junto con su familia. Sus hijos estudian en el Colegio Cumbres Godwin de Mérida, en cuya comunidad estudiantil y de padres de familia causó conmoción la noticia.

El profesional, de 42 años, fue asesinado de un balazo en Morelia, capital de Michoacán, luego de resistirse a un asalto. Viajaba junto con su esposa y sus cinco hijos, cuatro mujeres y un varón.

Desde el miércoles al mediodía, tanto en las redes sociales como en el Whatsapp, comenzó a circular la versión del homicidio, que ocurrió el martes cerca de las 23:00 horas.

Radicados en Mérida

El señor Ugalde Alvarez litigaba casos mercantiles y civiles en la Ciudad de México, pero su familia radicaba en Mérida.

Según se informó, la familia regresaba a Morelia luego de un viaje cuando fueron sorprendidos por unos asaltantes. El padre de familia se resistió al atraco y los sujetos le dispararon en la cabeza. Al ver que no lograron su propósito de robar, los delincuentes se dieron a la fuga. Testigos dijeron que, al parecer, eran cinco sujetos.

Herido de gravedad, Ugalde Álvarez fue auxiliado por su esposa e hijo, quienes lo subieron a una camioneta para llevarlo a un hospital, pero en el trayecto perdió la vida.

Se averiguó que en el camino una ambulancia interceptó la camioneta donde era trasladado Ugalde Álvarez, y al revisarlo los paramédicos detectaron que ya no tenía signos vitales.

Un perito criminalista levantó el cuerpo y lo envió al Servició Médico Forense (Semefo) de Morelia.