Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- La delegación estatal de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) cuenta con un padrón de 135 talleres mecánicos en Mérida, muchos de los cuales fueron sujetos a regulación luego de cometer diversas irregularidades, entre ellas reciclar piezas sin conocimiento del propietario del vehículo e incumplir con el plazo de entrega de los trabajos.

Tan sólo en lo que va del segundo semestre del año, la dependencia federal ha levantado actas de suspensión y sanción a 16 talleres mecánicos en la ciudad, cuyos establecimientos no presentan a los clientes el costo de sus servicios, confirmó el delegado de la Profeco, José Antonio Nevárez Cervera.

“En el segundo semestre del año, la delegación de la Profeco recibió quejas de ciudadanos contra 69 talleres mecánicos porque los engañaron al contratar un servicio; se efectuó la investigación y efectivamente se descubrió la falta”, afirmó el funcionario.

Una de las quejas recurrentes entre los vecinos de talleres mecánicos es que estos negocios utilizan los alrededores del local como estacionamiento público, lo que en muchos casos genera caos vehicular.

Ante esta situación, afirman, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) conmina a los propietarios de talleres a retirar de la vía pública esos vehículos, y en caso de no hacerlo, son retirados con grúa; no obstante, sancionar al taller corresponde al municipio.

Las sanciones que aplica el municipio por el uso del espacio público van desde un salario mínimo por metro cuadrado, hasta los 250 mil pesos.

Se estima que en la ciudad operan al menos otros 100 talleres mecánicos que no están registrados ante la Profeco, ya que en 2010 la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) reportó 219 de estos negocios operando en la ciudad.

Cabe indicar que el Plan de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Mérida exhorta a que los propietarios de los predios se inscriban al padrón de registro, y deben cumplir diversos requisitos, como no establecer un taller mecánico cerca de zonas habitaciones. 

“De no cumplir con lo estipulado, recibe tres notificaciones en caso que tenga autos estacionados que bloqueen arterias principales de la ciudad, y posteriormente su suspensión definitiva y retiro de unidades”, explicó el presidente de la comisión permanente de Desarrollo Urbano, Mauricio Díaz.

Consejos de la Profeco a los clientes de talleres mecánicos

Para evitar inconvenientes, la Profeco invita a los consumidores a estar al pendiente del comportamiento de los mecánicos a la hora de dejar el auto, ya que un buen mecánico explica paso a paso “con manzanas y naranjas” el problema del auto, “sin enredarte con términos que ni él mismo entiende”.

Sugiere no dejarse enredar por los “diagnósticos” hechos con sólo ver el auto, y recomiendan que en cuanto se pague se solicite amablemente al mecánico que le regrese las piezas que cambió.

Un mecánico honesto no titubeará al momento de dar lo que se le pide, en la caja donde extrajo la pieza nueva.

Asimismo, la dependencia recomienda seleccionar refacciones originales, aunque no se efectúen las reparaciones en la agencia. No obstante, depende de la reparación que necesite el automotor pueden ofrecer piezas usadas para ahorrar dinero.

Si el vehículo requiere trabajos de pintura, se debe preguntar cuántas capas y recubrimiento transparente le pondrán, es importante estar atento a todos los servicios que requiere el auto en tiempo y forma, “aunque parezca raro conocer un poco del tema, hará que no te vean la cara a la hora de contratar un servicio”.

Obligados a contrato

La Norma Oficial Mexicana (NOM) 068 SCFI-2000 establece que los talleres mecánicos están obligados a firmar contratos con sus clientes para informar sobre sus servicios ante Hacienda y debe estar registrado ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).

Incumplir ambos requisitos genera infracciones a la ley, y por tanto, una sanción equivalente a seis salarios mínimos.

En relación con las visitas de verificación a dichos establecimientos, en lo que va del segundo semestre de 2016 se han registrado 28, de las cuales 16 derivaron en aplicación de sanciones. Se han interpuesto 13 quejas y ocho talleres fueron suspendidos por faltas al contrato, comportamiento comercial inadecuado, montos de reparación excesivos y “promociones” sin información concreta.

Los talleres mecánicos que fueron sancionados no ofrecieron un contrato de servicio a los consumidores, ni los servicios que ofrecen y la lista de precios, engañando a los que acudieron por una atención, ya que además les hicieron un mal trabajo, por lo que dichos establecimientos fueron multados.

De los talleres mecánicos, 13 no cumplieron con la norma 174, 15 por prácticas o comportamiento comercial y nueve no cuentan con contratos de adición, en el padrón de talleres hasta el momento son 135 con contrato de adición.
Milenio Novedades/Mérida

Acumulan clausuras  y fuertes sanciones

Por otro lado, en lo que va del año, la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) ha inspeccionado 122 talleres mecánicos de la entidad, de los cuales seis fueron clausurados como medida de seguridad, y se sancionó con un monto total de 700 mil 500 pesos.

Las infracciones más recurrentes son por no contar con registro como generador de residuos peligrosos ante Semarnat, no tener bitácora de generación de residuos peligrosos y almacenar residuos peligrosos por más de seis meses.

Asimismo, no almacenar adecuadamente, conforme a su categoría de generación, los residuos peligrosos en un sitio que reúna las condiciones señaladas por la ley, no identificar, clasificar y manejar los residuos peligroso.

El secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), Eduardo Batllori Sampedro, explicó que por sus características físicas y químicas, los aceites usados y mal manejados afectan al medio ambiente de diversas formas y pueden dañar la salud.

Por ejemplo, un litro de aceite usado puede contaminar un millón de litros de agua, dañando así la agricultura, la fauna, la flora, al ser humano y plantas de tratamiento de aguas residuales. Al no mezclarse con el agua y mantenerse en la superficie, los aceites usados bloquean los rayos solares y el paso del oxígeno afectando la vida acuática y sus procesos vitales.

Existen datos de que si se manejan mal pueden y dañar la salud y afectan al medio ambiente, pues se tratan de sustancias tóxicas. 

Cuidado

• Se debe cuidar dónde se tira el aceite de los talleres, ya que si se arroja al suelo, éste lo absorbe y llega a las raíces de las plantas, que se comen las vacas y hasta las personas.