Manuel Pool/SIPSE
PROGRESO, Yucatán.- La falta de conciencia de algunos porteños de no entregar sus desperdicios a los recolectores autorizados sigue siendo uno de los principales problemas que enfrenta la actual administración, que para poner solución a este asunto ha anunciado, de voz del propio alcalde, Daniel Zacarías Martínez, que el servicio de recoja de desechos pronto se ofrecerá de manera gratuita, como sucede en las comisarías de Chelem y Chuburná.

Mientras esto sucede, seguirán registrándose escenas como la de la gráfica, la cual corresponde al cruzamiento de las calles 78 por 33 a espaldas de una escuela primaria, donde vecinos no se conforman con abandonar las bolsas de desperdicios, sino que aprovechan la oportunidad para dejar colchones y otros artículos que se convierten en obstáculos para los transeúntes.

En calles aledañas al mercado también es frecuente encontrarse con los botes dispuestos para la basura peatonal llenos, con grandes bolsas de basura proveniente de los comercios de la zona. 

Hasta antes de que fuera destituido el director de Ecología, Arturo Quezada Pech, se imponían multas a los infractores al reglamento de la materia, la cual, al parecer, con su fusión con la Dirección de Obras Públicas, disminuyó.