Martha Chan/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- A partir de hoy, los visitantes del zoológico del Centenario podrán disfrutar y conocer a los nuevos integrantes de la familia de los felinos: dos cachorras de ocelote que nacieron hace mes y medio, luego de cinco años que esa especie no se reproducía en el parque meridano.

El nacimiento de las pequeñas cachorras de “xacxicín” (ocelote en maya) es considerado el primer logró exitoso del personal del Centenario, pues desde septiembre comenzaron con el tratamiento para que la hembra, de 10 años de edad, se pudiera preñar.

Luis Jorge Montalvo Duarte, subdirector de Servicios Generales del Ayuntamiento de Mérida, informó que se lanzará una convocatoria para que los niños y niñas pongan nombre a las pequeñas felinas, como se ha acostumbrado en los últimos años con toda especie que nace.

“La convocatoria podría darse a conocer en los próximos días y los nombres elegidos en febrero próximo o hasta abril en el Día del Niño”, indicó que funcionario.

Montalvo Duarte presentó formalmente a las pequeñas felinas, consideradas por los mayas prehispánicos un objeto de veneración por ser símbolo de valentía y fortaleza, al grado de que la imagen de esos felinos está registrada en códices, estelas y otras representaciones mayas, incluso, los usaron para nombrar un mes del calendario mexica.

Informó que el periodo de gestación fue de 70 días, las cachorras nacieron a mediados de noviembre y luego de pasar su período crítico y quedar en perfectas condiciones, el público ya las podrá disfrutar en su hábitat.

El jefe de Departamento del Zoológico, William Cabrera Borges, destacó que el Centenario se convertiría en el segundo parque recreativo en tener crías de ocelote en cautiverio. El primero es el de Culiacán.

“Se realizaron cambios en la alimentación y hábitat de la felina, a la cual se suministró vitaminas y minerales para mejorar su sistema de reproducción, así como mantenerla en óptimas condiciones y sin estrés”, explicó.

Como gatos

• Los ocelotes pueden confundirse con gatos domésticos, son de color gris mate con marcados pigmentos cafés de bordes negros y manchas en el cuerpo; son tímidos.
• Las cachorras de ocelote aún están lactando, y sus padres no se separan de ellas, por lo que hacerles un chequeo rutinario es muy riesgoso.