El agujero en la capa de…

Lo que realmente nos"defiende" del Sol no es el ozono, sino el oxígeno.

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Se ha hablado en los últimos días de la protección que el ozono ofrece a nuestro planeta y se sigue insistiendo en que es el que actúa en favor nuestro y no que el que realmente lo hace es el oxígeno.

Hace años cuestioné en un congreso el entonces tópico novedoso del agujero en la capa de ozono, como indicador de la contaminación atmosférica; dije que era algo natural lo que ocurría sobre la Antártida y en menor escala sobre el Ártico, y que estos agujeros se generaban cuando se presentaban las condiciones invernales que, a causa de la inclinación del eje de rotación de la tierra con respecto al plano orbital, reducía fuertemente la incidencia de la radiación solar sobre esas regiones, lo que prácticamente reducía a cero la producción de ozono.

La vida en la Tierra ha sido protegida miles de años por el oxígeno que produce una capa de filtración inestable en la atmósfera superior. Esta capa, generadora del ozono, sirve de escudo para proteger al planeta contra la radiación ultravioleta solar, que es absorbida por el oxígeno que se ioniza produciendo el ozono, que por su inestabilidad se convierte de nuevo en oxígeno, que de nueva cuenta actúa como filtro protector. Al parecer, esta condición es exclusiva de nuestro planeta, y de no existir el oxígeno en las capas superiores de la atmósfera, la luz ultravioleta del sol esterilizaría la superficie del globo, nos dejaría ciegos y aniquilaría la vida terrestre.

En realidad el ozono es un elemento inestable que es una transformación del oxígeno, ya que sus moléculas tienen tres átomos en vez de dos, es decir, por cada tres moléculas de oxígeno se generan dos moléculas de ozono, un gas que si lo respiramos en pequeñas cantidades puede envenenarnos. Resumiendo: gracias a procesos atmosféricos naturales, las moléculas de ozono se crean y se destruyen continuamente al absorber la radiación ultravioleta de la luz solar.

Las redes de monitoreo de la calidad del aire en zonas urbanas incluyen la medición de los niveles de ozono, ya que en la superficie el ozono es un contaminante que causa muchos problemas como parte del esmog fotoquímico y del coctel de contaminantes que se conoce popularmente como lluvia ácida.

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