La histeria resulta imposible sin público.- Chuck Palahniuk

La Real Academia Española define la palabra pánico como: Dicho del miedo o del terror: extremado o muy intenso, y que a menudo es colectivo y contagioso. Es con esta definición con la que describiremos este trabajo.

Sin darnos cuenta la vorágine de la comunicación nos consume, nos volvemos permisivos y multiplicadores, muchas veces hasta de lo absurdo. No paramos de comunicar, efectivamente es parte de la naturaleza humana, pero el análisis de lo que comunicamos está dejando mucho que desear.

Con motivo del avance tecnológico, ya tenemos resultados sin precedentes en la comunicación, pero también se observan cosas que sin sustento, sin fundamento, erosionan la credibilidad entre nosotros y para con los demás.

Es así que de la nada surgen o aparecen hechos que logran atormentar la vida diaria de cualquier persona; hace unos días se fortaleció la teoría de la supuesta visita a Yucatán de una secuestradora, de la que se decía que ya tenía en su haber no menos de veinte menores de edad en su lista. Esa historia no terminó con esos dichos, al contrario, se le fueron agregando ingredientes, al punto tal de involucrar el supuesto dicho de un funcionario de seguridad y justicia con información privilegiada, mismo del que se decía que sólo compartió tal información con personas cercanas con la finalidad de que tuvieran cuidado.

No cabe la menor duda de que la tecnología actual contribuye, ayuda y sostiene la ágil forma de comunicar todo, pero también favorece a los intereses obscuros de quienes quieren tenernos en sobresalto permanente. Hechos muchos, buenos pocos, pero al final todo se convierte en información.

Los dichos propios sin filtro, más que los informes del Estado, son hoy lo que más contribuye a tensar nuestra vida diaria, poniéndonos en suspenso, al grado tal de llevarnos al pánico.
Hoy nuestra tarea podrá ser encontrar los mejores filtros para dar sustento y no sólo forma a la información que compartimos; nada más siendo responsables podremos transmitir información verídica.