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El secreto del verdugo es la vida novelizada de una persona que tenía como actividad profesional operar la guillotina y/o la palanca de la trampa de ahorcamiento en los patíbulos de todo aquel país.

Su trabajo lo obligaba a viajar constantemente, pero a su familia le había hecho creer que era peluquero y tenía clientes importantes por todo el país y estos pagaban muy bien. Como el verdugo siempre se presentaba encapuchado, nadie conocía su identidad.

Se decía ateo y no tenía interés en saber el origen de la vida, solo vivía el aquí y el ahora, y se sabía respetuoso de la ley, pues cumplía los mandatos de ésta al realizar su trabajo.

Si los opositores a la pena capital hubieran conocido la identidad del ejecutor, le hubieran presionado inútil y tontamente para que no llevara a cabo su trabajo, cuando a donde debían ir era a las cámaras, para que legislen aboliendo la pena de muerte.

Muchas personas opinamos que bajo ninguna circunstancia debe permitirse el aborto, ni recurrir al suicidio también bajo ningún pretexto.

Siempre será más justo desestigmatizar socialmente el suicidio, puesto que se trata de un individuo que no desea vivir, que permitir la interrupción del embarazo mediante el aborto, pues se trata de un ser que indudablemente estaría en condiciones de vivir.

Los verdaderos verdugos son los legisladores que permiten el aborto sin justificación, si es que pudiera haberla, cuando existen tantas instituciones dispuestas a ayudar a las futuras madres que no desean serlo, para que su momento de dar a luz llegue con todos los apoyos médicos y económicos que le permitirán transitar este periodo para ella no deseado bajo circunstancias favorables a su salud física y material.

ENTRE OTRAS COSAS, se está volviendo un verdadero problema para los impartidores de justicia el caso de MÓNICA P.R., a quien sus suegros quieren quitarle a sus dos hijos. Si el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia, Marcos Celis Quintal, no pone orden en este asunto, el problema va a tomar proporciones importantes, ya que un sector de la sociedad yucateca está cada vez más interesado en darle seguimiento.

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