La futura secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, presentó ante el Senado –del cual aún es integrante- la iniciativa de la Ley General de Regulación y Control de Cannabis, que describe como un modelo de regulación estricta, es decir, un punto medio entre la prohibición absoluta y el libre mercado.

Algunos puntos de la propuesta son el fomento al cultivo para uso personal, la posibilidad de cooperativas, la creación del Instituto Mexicano de Regulación y Control del Cannabis, así como un mercado que fomente una industria sólida.

En el Artículo 4 señala condiciones para la siembra, cultivo, cosecha, producción, etiquetado, empaquetado, promoción, publicidad, patrocinio, transporte, distribución, venta y comercialización y precisa que toda persona tiene derecho a portar hasta treinta gramos.

Quienes requieran portar más de treinta tendrán que solicitar permiso al instituto. En el capítulo de consumo personal señala que la producción de Cannabis no sobrepase los 480 granos por año.

Si la ley pretende tener un control responsable sobre el consumo de la mariguana con fines lúdicos, se debe analizar con más detenimiento la propuesta de utilizar solamente 480 gramos por año, ya que más de dicha cantidad podría conseguirse en el mercado negro, que por lo general es dominado por el crimen organizado, sobre todo que ya estaría permitido fumar mariguana es espacios públicos, a excepción de los libres de humo de tabaco.

El Artículo 42 habla de que la mariguana mezclada con otras sustancias tales como alcohol, nicotina, tabaco, cafeína, o cualquiera aumentaría, real o potencialmente, el nivel de adicción.

En este apartado es necesario fijarnos en el mercado internacional, específicamente Estados Unidos, ya que la compañía estadunidense Constellation Brands Inc. compró casi el 10% de participación del productor canadiense Canopy Growth Corp., con lo que se convierte en el primer fabricante de vino y cerveza en invertir en el sector de cannabis legal.

La exposición de motivos que respalda el grupo de Morena externa que la mariguana tiene diversas propiedades farmacológicas: analgésicas, ansiolíticas, antidiabéticas, antimicrobianas y neuroprotectoras y compila los siguientes padecimientos para los que ha mostrado su efectividad: cáncer, diabetes mellitus, glaucoma, epilepsia, ansiedad, depresión, trastorno del sueño, dolor crónico, enfermedades terminales.

Si esta iniciativa es respaldada por el Estado, se tiene la obligación de que desde los libros de texto a los niños y adolescentes se le permita saber con base en información científica cómo el consumo de la mariguana a edad temprana les puede causar daños irreversibles.