Historia del día de prima vacacional (II)

Y así corrieron los años, hasta 2016, con un magisterio confiado en sus conquistas salariales sin sospechas del pago incompleto.

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Continuando con la aclaración sobre el pago faltante de un día de prima vacacional, por el mes de junio del año de 1994, en su primera negociación salarial ya como secretario general de la sección 57, Roger Pinto Achach firma la minuta sobre la negociación respectiva de ese año consiguiendo un día adicional de prima vacacional para llegar a seis días y que, a diferencia de los otros cinco ya establecidos, se integraba con el sueldo tabular y el valor correspondiente al quinquenio que el maestro cobraba; al parecer fue ganancia para el magisterio, sin embargo, nadie supo si a cambio de ese nuevo día se nos descontaría uno de los cinco ya existentes como ahora ya sabemos y comprobamos.

Y así corrieron los años, hasta 2016, con un magisterio confiado en sus conquistas salariales sin sospechas del pago incompleto. Fue hasta el seis de marzo de 2013, cuando, a iniciativa del profesor Luis María Aguilar Castillo, entonces integrante del colegiado de negociación, se presionó al secretario general, Marbellino Burgos Narváez, para que solicitara al secretario de Educación, Dr. Raúl Godoy Montañez, a través del oficio No. 495/2013 el pago del día que no se hacía en el cheque de los maestros describiendo y explicando el cálculo de dicha prestación.

A esta solicitud, la Segey no dio respuesta alguna. Ya como secretario general de la sección 57, el profesor Luis María Aguilar retomó el reclamo y, con fecha nueve de enero de 2017, entregó al actual secretario de Educación, maestro Víctor Caballero Durán, un nuevo oficio, el 021/2017, donde hace referencia al anterior y solicita nuevamente la aplicación correcta de los cinco días de prima vacacional. Esta vez el reclamo tuvo eco y pronta respuesta, ya que, en la negociación salarial pasada, se acordó que, considerando que prescribe el adeudo de años anteriores, se pagarían a partir de 2017 los seis días de prima vacacional de manera completa, todos ellos con el sueldo y quinquenio correspondiente a cada trabajador considerando la categoría y el nivel educativo donde se encuentre. Este hecho se puede constatar verificando su pago en los talones de cheques de los trabajadores. Ahora puede entenderse lo que el director jurídico de la Secretaría de Educación, Rolando Bello Paredes, afirmó a fin de año: que la Segey no adeuda nada al magisterio de educación básica.

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