Interesado en los asuntos de números y por mi inclinación profesional de economista, jugaba ayer con los datos de la transferencia de Neymar Jr. del FC Barcelona al París Saint Germain, de la “Ciudad condal” a la “Ciudad de la luz”, cuando me topé con cifras que son claro indicio de lo injusto de nuestro sistema económico y de lo absurdo del comportamiento humano en relación con los criterios usados para tomar decisiones para la inversión de capitales.

Y conste que el futbol es mi deporte favorito y que admiro el nivel del juego europeo, que contrasta con el estancamiento del mexicano, sobre todo de los mejores equipos como el Real Madrid, Barcelona, el Manchester, la Juve y el Bayern Munich, que sin duda cuentan con los mejores futbolistas del mundo.

Pero, más allá de las figuras y el glamur, si comparamos los datos duros podemos sentirnos un tanto escandalizados, comenzando v. gr. con el costo de la transferencia del brasileño que está entre los más cotizados y que ascendió oficialmente a 222 millones de euros, que de entrada no se mira mal; pero cuando los convertimos a nuestra moneda nos percatamos que representan algo así como 4 mil 440 millones de pesos, lo que no deja de ser una cifra grande, pero cifra al fin, con muchos ceros.

Mas para tener un punto de comparación saco de mi correspondencia otra serie de datos que nos pueden permitir aquilatarla mejor y descubro que el costo de la transferencia representa grosso modo la mitad de la Inversión federal en obra pública en el Estado de Yucatán durante el cuatrienio 2012-2016, que en números redondos fue de 8 mil 800 MDP, y asimismo representa casi la tercera parte de la suma de la inversión federal y estatal en el mismo lapso, que fue de 14 mil 300 MDP.

Pero no se crea que es una cifra convencional cualquiera, se trata de una inversión sin precedente, la máxima en la historia de Yucatán, en obras de infraestructura, durante 4 años, de la que podemos sentirnos orgullosos.

Injusto a la vez que absurdo me parece que la simple transferencia de un futbolista, por más bueno que fuere, se pueda igualar a la máxima inversión en dos años en obras de infraestructura para nuestro Estado, ello sin considerar el costo de los sueldos y prestaciones que gozará Neymar, como el departamento en les Champs Elysees, el avión para sus traslados, patrocinios y demás.

Seguridad.- La sociedad yucateca aplaude las recientes medidas tomadas por la administración de Rolando Zapata Bello para preservar y reforzar la seguridad y la justicia, como el aumento de sueldo del 50% para los elementos de la SSP, la contratación de 550 policías estatales, y de 160 fiscales investigadores, peritos y médicos para la FGE. Sueldos justos son un buen antídoto contra la corrupción.