Manuel Pool/SIPSE
PROGRESO, Yuc.- Un ambiente cálido pero nublado predominó ayer durante la visita a Progreso del Carnival Triumph, que puntual a su cita de mitad de semana arribó a la terminal remota a partir de las 7:34 horas.

De acuerdo con información proporcionada por la dirección de recaudación fiscal, mercados y turismo, en su escala hacia Cozumel la enorme nave trajo a 3 mil 403 pasajeros provenientes de Galveston, Texas.

Como es costumbre, poco después de que la nave atracó en la terminal de cruceros inició el desfile de numerosos autobuses que trasladaron a los paseantes al puerto, donde a su llegada a los puntos establecidos, como lo son el Centro Comercial Las Velas y el Bazar de Artesanías, eran ya esperados por promotores de tours que los invitaban a dar un paseo por la capital del estado así como en las zonas arqueológicas cercanas. Otros contrataron tours en la misma terminal remota, donde también se cuenta con una tienda de “duty free” y artesanías.

Como una probadita de lo que será el ambiente que se vivirá durante las vacaciones de verano en el puerto, una gran cantidad de visitantes de la capital yucateca y de poblaciones cercanas se dieron cita en el malecón, que lució esplendoroso, con una muy buena actividad en materia de servicios acuáticos, en especial los paseos en banana.

Las masajistas que laboran en este lugar comentaron que durante la jornada lograron “sacar el día”; mientras que las palapas en renta con mesa incluida, al igual que las de los restaurantes, se veían con una muy buena afluencia.

Jornada fructífera

Vendedores de kibis, marquesitas y otros productos también indicaron que la jornada fue muy fructífera, por lo que se dijeron contentos por la buena respuesta de los visitantes, sobre todo de la región que ya comienzan a llegar.

A lo largo delas playas se podía apreciar a numerosos bañistas que al salir del agua se acomodaban en los camastros ubicados en el lugar, y otros lo hicieron sobre la arena, sin importarles el ruido que a poca distancia hacía otro grupo de extranjeros que se entretenía bailando o jugando volibol.

Hacia las dos de la tarde comenzó el éxodo hacia la terminal remota, de donde el Triumph partió hacia la Isla de las Golondrinas a las cuatro de la tarde.