Luis Fuente/Milenio Novedades
MÉRIDA.- En total fueron siete impactos de bala los que recibió Javier Humberto Franco Hernández (a) “El Güero”, una de ellas en la cabeza que le causó la muerte, al ser atacado por sicarios de Playa del Carmen, quienes al mediodía del domingo pasado lo ejecutaron a las puertas de su restaurante, en Chicxulub Puerto, atentado presuntamente relacionada con el crimen organizado, ya que la víctima tenía una deuda por drogas con una célula del narcotráfico en Quintana Roo.

La autopsia realizada por el Servicio Médico Forense determinó que la causa de la muerte fue traumatismo craneoencefálico secundario a disparo de arma de fuego. En total el cuerpo presentaba siete impactos de bala: seis en la espalda y uno en la parte posterior de la cabeza.

Los peritos del Instituto de Ciencias Forenses también determinaron que el arma utilizada en estos hechos fue un revólver calibre .38 súper.

El domingo Milenio Novedades informó que Javier Humberto Franco Hernández (a) “El Güero”, de 46 años de edad, fue ejecutado a las puertas de su restaurante de mariscos “Ina Beach”, ubicado en la calle 20 por 17 de Chicxulub Puerto, cerca del muelle de pescadores.

Los autores de este crimen, tres hombres y una mujer, fueron detenidos posteriormente en el puesto de control y revisión de la Secretaría de Seguridad Pública instalado bajo el paso a desnivel del cruce de la carretera a Cancún y la de Chetumal, a la altura de la hacienda Teya.

A disposición de la FGE

Los cuatro sujetos están a disposición de la Fiscalía General del Estado que integra la carpeta de investigación por el delito de homicidio calificado y de portación de armas e instrumentos prohibidos.

Franco Hernández era originario de Chetumal y hasta hace unos meses se desempeñaba como taxista del sindicato “Lázaro Cárdenas del Río” de Playa del Carmen, que se disputan grupos rivales del crimen organizado para tener el control de esa agrupación que es utilizada para la distribución y venta de drogas a menudeo, principalmente en la zona hotelera de la Riviera Maya y en ese polo turístico.

Sobre el mortal atentado, se informó que ocurrió el domingo 23, cerca del mediodía, cuando apenas estaban abriendo el restaurante. En eso llegaron dos sujetos al establecimiento y se sentaron cerca de la barra, donde ubicaron al “Güero”, y comenzaron los disparos.

El ex taxista, al verse en peligro, salió corriendo por la parte posterior del restaurante, pero fue perseguido y le dispararon por la espalda, que lo hizo caer al suelo a las puertas del inmueble que habitaba con su familia, ubicado a un costado del establecimiento, donde incluso los matones le dieron el “tiro de gracia” en la nuca.

El ahora occiso fue identificado por su esposa, A. L. R. C., de 43 años de edad y originaria de Mérida, quien dijo que ella, su esposo y sus dos hijas llegaron a la comisaría progreseña hace unos siete meses, procedentes de Playa del Carmen, para establecerse en el lugar y comenzar “una nueva vida”.

En las próximas horas, los cuatro detenidos serán presentados ante el juez primero de control con sede en Progreso, quien resolverá la situación jurídica.