Manuel Pool/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Fiel a su cita y procedente de Galveston, Texas, ayer a las 7:26 horas arribó a la terminal remota el crucero Carnival Triumph, que trajo 3 mil 444 pasajeros que en su gran mayoría viajaron a Mérida y a las principales zonas arqueológicas de la entidad. 

En la zona del malecón, el sindicato de taxistas y a lo largo de la calle 80, los vendedores de artesanías y prestadores de servicios manifestaron que a pesar de que el tiempo mejoró en comparación con el lunes, esta jornada fue considerada una de las peores en cuanto a las ventas.

La sal y pimienta de la jornada se presentó cuando dos locatarios del bazar de artesanías, Luis Cabrera y Alejandro Manzanero, se liaron a golpes, al parecer, porque uno le faltó al respeto a la mujer del otro, por lo que la policía municipal intervino para llevarlos a las oficinas de recaudación fiscal, donde fueron sancionados con tres días de crucero sin laborar.

A ambos se les permitió concluir sus labores en la jornada a fin de reunir dinero para pagar los destrozos que hicieron en el lugar, donde tiraron varias mesas y dañaron mercancía de sus compañeros.

Paradójicamente, muchos coincidieron en que el lunes pasado, aun con la lluvia, les fue mejor que ayer.

“Vendí tan poco que apenas saqué mis gastos, pero no obtuve ganancias”, dijo Leonardo Martín, un veterano vendedor de sombreros que se instala a las puertas del bazar de artesanos.

En el mismo sentido se pronunció una de las masajistas del lugar, mientras sus compañeras hacían una coperacha para comprar sus alimentos y compartirlos a fin de gastar lo menos posible y llevar algo de dinero a sus casas.

Hubo excepciones, como la de Manuelito, un joven con discapacidad que ofreció a los visitantes grillos elaborados con hojas de palma, y que en esta ocasión se quedó con solo dos de los 40 que elaboró.

El lunes pasado Manuelito, quien se dedica a esta actividad a pesar de tener problemas en las articulaciones de las manos, solo vendió tres, por el mal tiempo.

Reunión de extranjeros

En conocido restaurante ubicado en la 80, que se caracteriza por ser sitio de reunión de la comunidad extranjera que radica en el puerto, se vivió un gran ambiente de fiesta, al que se sumaron algunos  cruceristas que animadamente conversaban en inglés con sus coterráneos.

Similar situación se registró en los restaurantes ubicados en la zona del malecón, no así en las palapas donde por momentos el viento fresco se sentía con intensidad.

El barco, que retornará el próximo lunes, zarpó a partir de la cuatro de la tarde con destino a Cozumel.