El primer fotógrafo de Yucatán

Fue el señor Antonio Pallás quien luego de un viaje a Estados Unidos conoció esta nueva invención y la trajo a Mérida alrededor del año de 1845.

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Esta imagen relata de manera visual un viacrucis que se desarrollaba de la Catedral a la desaparecida iglesia de “Jesús María”, ubicada en la calle 59 con 62 y 64. De los edificios que se aprecian en dicha fotografía sólo se conservan la edificación de dos pisos que se ubican al costado derecho; la Catedral; y más al fondo el edificio conocido como “El Gallito”. Del costado izquierdo podemos observar un área vacía, y es lo que hoy es el conocido Parque Hidalgo. (Sergio Grosjean/SIPSE)
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Sergio Grosjean/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- De acuerdo al diario “El País”, fechado el 27 de abril de 1899, fue el mexicano catedrático de química, Manuel Herrera, quien inventó la fotografía, al mismo tiempo que Daguerre publicaba en París su invento y llamado precisamente “El Daguerrotipo”, por lo que entonces, de acuerdo a esta nota, al mismo tiempo se cocinó en ambos países este maravilloso invento. El conocido también como "Daguerrotipo" fue el primer procedimiento fotográfico anunciado y difundido en el año de 1839 y oficialmente desarrollado y perfeccionado por Louis Daguerre. 

En Yucatán, hasta donde tenemos conocimiento, fue el señor Antonio Pallás, hombre casado y de aparente origen fuereño, quien luego de un viaje a los Estados Unidos de Norteamérica conoció esta nueva invención y la trajo a Mérida alrededor del año de 1845, emprendiendo con ello una nueva profesión en la que hacía retratos por medio del procedimiento cuanto admirable y sencillo, en el que la luz es el principal agente.

Según nos narra una nota de aquel entonces, habían obras suyas a la mano que reunían toda la perfección de que eran susceptibles, agregando que la operación era obra de tan solo 30 segundos, y que era hasta donde podía alcanzar el arte. Se dice que en ese tiempo el hombre en cuestión se comprometió a realizar retratos del obispo, así como vistas de la catedral, y de otras iglesias y elegantes edificios de la ciudad. 

Ese fue un paso y muy avanzado para el establecimiento de la litografía que tanto se ansió para unir a la imprenta. Hasta el momento, no tenemos conocimiento de la existencia de alguna copia u original de su trabajo, aunque pienso que seguramente en alguna bodega andará arrumbado alguno de estos negativos, y si alguien tiene en su propiedad cualquiera de esas imágenes, no dude en escribirme que le daremos el justo y merecido valor. 

Pocos años más tarde, es decir, en la siguiente década, llegó a Yucatán el fotógrafo francés Claude-Joseph Désiré Charnay, quien obtuvo fotos muy bellas y, una de ellas, emblemática del Centro Histórico de Mérida y traída nuevamente a la mente por nuestro buen amigo, el arqueólogo e ilustre colaborador del De Peso, Mario Garrido. Esta nos relata de manera visual un viacrucis que se desarrollaba de la Catedral a la desaparecida iglesia de “Jesús María”, ubicada en la calle 59 con 62 y 64. 

Muchos nos preguntamos cómo captó la imagen el hombre, ya que parece estar posicionado a lo alto y enfrente de la iglesia de Jesús o Tercera Orden. De los edificios que se aprecian en dicha fotografía sólo se conservan la edificación de dos pisos que se ubican al costado derecho, la catedral, y más al fondo el edificio conocido como “El Gallito”. Del costado izquierdo podemos observar un área vacía, y es lo que hoy es el conocido Parque Hidalgo, mismo que se enmarca por construcciones coloniales ya desaparecidas, como ya dijimos. 

Dicho parque lleva oficialmente el nombre de Manuel Cepeda Peraza, en honor al extinto Gobernador y General que luchó férreamente contra los insurrectos mayas durante la llamada Guerra de Castas o Guerra Campesina. Curiosamente, el parque es conocido como Hidalgo o de los Hidalgos, ya que en esa explanada entrenaban a los hidalgos, hombres que por sus venas corría sangre maya y que en esa conflagración pelearon contra los mismos mayas insurrectos.

Y aprovechando la situación que hablamos de la fotografía y la iglesia de “Jesús María”, quiero nuevamente ofrecer una recompensa en efectivo y con créditos a quien nos facilite alguna imagen de dicho templo que fue expropiado por el general Salvador Alvarado y convertido en un templo masón de estilo neo-maya, y que más adelante fue demolido con el pretexto de crear el Teatro de la Ciudad, pero por alguna circunstancia fue vendido y hoy es un estacionamiento público. 

Existen solo tres fotos exteriores cuando fue convertido en dicho templo masón, pero hasta la fecha no conocemos a alguien que posea una sola imagen, dibujo o pintura de cuando fue templo católico. 

Así que, por favor, mucho le agradeceremos apoyarnos en el recate de nuestra memoria histórica. 

Mi correo es [email protected] y Twitter: @sergiogrosjean

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