El policía que fue atacado por una 'bruja voladora'

Un regiomontano de vacaciones en Mérida recuerda la experiencia que vivió hace casi 9 años con un ser paranormal.

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Esta es la descripción que dio el policía a lo que vio esa noche, muy parecido a la llamada 'bruja de Flatwoods'. (Jorge Moreno/SIPSE)
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Jorge Moreno/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- En las vacaciones de Semana Santa de este año vinieron a Yucatán miles de turistas nacionales, entre ellos el regiomontano Manuel Sifuentes Muñoz, quien hace casi nueve años vivió una experiencia paranormal a la que se dio mucha difusión en el país.

Los hechos ocurrieron en Nuevo León, de donde es originario, y aunque propiamente él no figuró en el hecho que tuvo gran relevancia, días antes de ese suceso él vivió una experiencia similar.

Hasta hace unos años, don Manuel Sifuentes fue policía en el municipio de Guadalupe, Nuevo León, y vivió en el año 2004 la experiencia de haber visto y haber sido literalmente “atacado” por lo que el considera una “bruja voladora”.

Tuve oportunidad de entrevistar a este señor debido a que su esposa y su hija ya me habían contactado vía mail desde hace un tiempo para informarme que estarían en Mérida de vacaciones, ya que querían adquirir algunos de mis libros (ellas se confiesan fanáticas del tema paranormal).

Y fue así como don Manuel recordó esa experiencia que vivió el 5 de enero de 2004.

“La verdad no soy muy afecto a figurar, en ese entonces me negué a salir en la televisión y a dar entrevistas, pero se filtró a la prensa la experiencia que tuve y fue mayor el impacto cuando días después a uno de mis compañeros le pasó lo mismo, sólo que él sí salió en los medios de comunicación a nivel nacional”, comentó.

“Pues bueno, yo estaba saliendo de la base, era un 5 de enero, lo recuerdo bien porque era la víspera del cumpleaños de mi hija... De pronto vi que una persona volando en un palo como una escoba, así como las clásicas brujas, de pronto bajó bastante como si fuera sobre mí. Yo por instinto cerré mis ojos y sentí mucho frío, como si me hubiera metido en una nevera llena de hielo... no me agredió propiamente sino que sentí como si atravesara mi cuerpo, cuando abrí los ojos se estaba alejando, fue casi traumático”, recordó.

No quería que trascendiera

“Se lo dije a muy pocas personas, sólo a dos de mis compañeros y a mi esposa, pero poco después ocurrió el otro caso en el cual todo el país se enteró y ahí se filtró que yo había vivido esa experiencia también", añadió.

“Muchos medios me estuvieron persiguiendo y hasta me ofrecieron dinero para que dé mi testimonio, pero en ese entonces preferí guardar el anonimato, ahora ya pasó el tiempo ya no me molesta tanto hablar de ello y ahora lo hago sólo obligado por mi esposa (ríe)”, señaló.

Aún así, don Manuel prefiere que no se le tomen fotos, y finaliza la entrevista diciendo: “Yo la verdad nunca había creído en las cosas extrañas o paranormales, pero ante lo que vieron mis propios ojos no me queda más que reconocer que todo eso existe, simplemente no hay una lógica de lo que viví”, finalizó.

Para contextualizar este caso, recordemos que en 2004 se dio a conocer a nivel nacional la noticia de que en la madrugada del 16 de enero un policía municipal de Monterrey reportó haber sido atacado por un extraño ser similar a una “bruja voladora”.

El protagonista de este caso fue el oficial de policía Leonardo Samaniego Gallegos, quien se encontraba a bordo de su patrulla realizando su rutina de vigilancia en la colonia Valle de la Silla, en Guadalupe, Nuevo León.

En unos segundos se dejó ver la cara, era de tez morena y tenía unos ojos muy grandes, totalmente negros, y expresión amenazante

Afirmó que transitaba por una calle de esta colonia y de pronto vio que algo caía de un árbol. "Era como un bulto grande que me llamó la atención, y como me pareció inusual y extraño detuve la patrulla y lo afoqué con las luces altas."

En unos segundos se dejó ver la cara, era de tez morena y tenía unos ojos muy grandes totalmente negros y una expresión amenazante. De inmediato puso en reversa su unidad dando marcha atrás a velocidad tratando de alejarse.

En ese momento el ser desconocido se abalanzó sobre la patrulla en una maniobra por demás inesperada, ya que se lanzó volando hacia el vehículo cayendo en el cofre del mismo. El oficial Samaniego la pudo tener a escasos centímetros separados solamente por el vidrio del parabrisas.

“Sus manos o garras arañaban el parabrisas tratando de agarrarme. Vestía totalmente de negro y era como una capucha que traía en la cabeza y una capa con una bola detrás. Yo pedía refuerzos desesperado por radio”, dijo el oficial. 

Llegaron refuerzos al lugar de los hechos y encontraron al oficial Samaniego dentro de su patrulla inconsciente, víctima de un desmayo. 

Al despertar dijo que era una bruja y volaba. El nerviosismo fue evidente en el joven oficial Leonardo Samaniego durante el testimonio dado a la cámara de televisión y un acentuado tic nervioso era visible en su pierna derecha al estar dentro de la ambulancia, reflejo innato del fuerte shock emocional. 

Fue trasladado a la comandancia para rendir el reporte oficial de lo sucedido y posteriormente trasladado al Hospital Universitario para practicarle una evaluación psiquiátrica así como una serie de exámenes antidoping. Los resultados demostraron que estaba física y mentalmente sano y los exámenes antidoping fueron negativos.

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