Cecilia Ricárdez/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Cuatro jóvenes con diferentes perfiles y de formación académica diversa se unieron por un común denominador: la creatividad. 

Iniciaron un proyecto en el que conjugaron sus experiencias para forjar una agencia de publicidad que atendiera a compañías con impacto internacional.

Comenzaron a trazar este camino cuando eran estudiantes, y ahora, como profesionales, intentan marcar un estilo y trascender, porque están seguros de que con las nuevas tecnologías no hay límites para crecer a nivel global.

Su agencia, llamada Cuatro Monos, expresa su personalidad dinámica y creativa, que intenta romper paradigmas, con la intención de ofrecer trabajos de calidad.

Rafael Capetillo Campos, Róger Méndez Castillo, Mauricio Ceballos Amozurrutia, de la Universidad Anáhuac y Víctor Pérez Ortiz, de la Interamericana para el Desarrollo, son parte de un equipo de 10 personas.

¿Cómo nació el proyecto?
Surgió la oportunidad. En abril de hace dos años, cuando estábamos trabajando en diferentes áreas, nos tocó coincidir, pues teníamos clientes en común. 

Un día, durante una plática nos planteamos la posibilidad de fundar algo juntos y nos arriesgamos.

¿Cómo resolvieron el tema financiero luego de tener el capital humano?
Tras salirnos de los proyectos en los que andábamos invertimos en el arranque, ya que no recurrimos a ningún tipo de financiamiento.

¿Cuál es la ventaja competitiva de su negocio?
Tratamos siempre de no caer en el lugar común, de ser auténticos y sin pretensiones. 

Desde la elección del nombre queríamos distinguirnos de las demás agencias. Además, trabajamos de tal manera que resolvemos sus necesidades de publicidad sin que ellos se preocupen.

También tenemos un grupo multidisciplinario que trabaja video, marketing tradicional y digital, medios impresos y diseño.

¿Cómo manejan la competencia?
En Yucatán hay jóvenes muy talentosos, tenemos buena relación con muchas agencias, ya que estudiamos con varios de sus integrantes. 

Nosotros tratamos de diferenciarnos en el estilo; creamos una marca que los clientes pueden distinguir, y presentamos a las empresas diseños limpios y líneas sobrias.

También, nuestra actitud es proactiva. Siempre buscamos ser originales y auténticos, pero sin forzar las cosas, las personalidad de todos están bien definidas y eso es lo que aportamos al trabajo.

¿Cómo protegen su trabajo creativo?
Si nos copian, que Dios los bendiga, porque nuestro trabajo ya es conocido y tenemos un estilo propio que es difícil igualar; cuando lo hacen, nos demuestran que estamos haciendo bien nuestro trabajo. De todos modos el nombre de la marca está registrado.

¿En su opinión, qué importancia tiene estar en el marco legal de todas las operaciones?
Si los emprendedores quieren que su empresa crezca deben estar en el marco de la ley, ya que así le dan seriedad a lo que hacen, por lo que pueden lograr la confianza de las grandes compañías.

¿La juventud ha sido aliada o enemiga de su proceso de desarrollo?
Ser jóvenes con una empresa que está iniciando pone algunas trabas, pero con la calidad de lo que hacemos ese problema se va resolviendo, luego comienzan las recomendaciones y los clientes te empiezan ubicar y poco a poco van llegando los proyectos. 

El reto fue convencer a los empresarios sobre las opciones nuevas de publicidad para dejar atrás la vieja escuela, pero lo van comprendiendo cuando les explicamos los beneficios. 

¿Se han enfrentado al regateo?
Sí, irónicamente los jóvenes son los que casi no nos piden rebajas porque son conscientes de la labor, en tanto los adultos son menos sensibles a eso, no obstante entendemos cuando debemos ajustarnos a presupuestos, como las empresas pequeñas de otros jóvenes, a quienes, dependiendo el caso, les damos precio especial.

¿Cómo se asesoran para desarrollarse no sólo en su área, sino como empresarios?
Nos apoyamos de Israel Imán Baquedano, consultor jurídico empresarial del programa México Emprende en la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) capítulo Yucatán; él nos ayuda en todo lo referente a lo administrativo. También recurrimos a expertos en el tema.

¿Cómo proyectan su negocio en los próximos años?
Atendiendo proyectos en cualquier parte del mundo. Curiosamente ahora estamos atendiendo un cliente cuya publicidad ha llegado hasta China. 

Tenemos clientes de otros estados y así paso a paso queremos convertirnos en los mejores del mercado.

¿Qué consejos podrían compartir a sus contemporáneos emprendedores?
Que no tengan miedo, que se animen; deben tener paciencia, pero sí se puede. 

Mérida no es el límite, además hay mercado para todos; mientras más competencia todos nos esforzaremos para hacerlo mejor.