William Casanova/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- La delegación yucateca de la Cámara Mexicana de la Industria de la Transformación urgió este martes a los industriales yucatecos a fortalecer su competitividad interna o, de lo contrario, no podrán sobrevivir con las nuevas reglas internacionales de competencia.

El directivo empresarial explicó que los acuerdos comerciales internacionales abren las puertas a nuevas oportunidades de crecimiento, “pero son una razón más para trabajar, con carácter urgente, en la elaboración e implementación de incentivos fiscales para las micro y pequeñas empresas.

El presidente de la delegación yucateca de la Canacintra, Mario Can Marín, explicó que el  Acuerdo Estratégico Transpacífico de Asociación Económica (TPP, por sus siglas en inglés) renueva las reglas de competencia a nivel internacional y hará que la competitividad interna de México sea, más que una prioridad, un factor de urgencia a fortalecer en las organizaciones.

“A pesar de los intentos por proteger sectores sensibles, habrán  afectaciones en las exportaciones que dañaran a sectores como el acerero, metalmecánico, farmacéuticos  y textil  por mencionar algunos”, indicó.

Como publicamos, la semana pasada terminaron las negociaciones del Tratado Comercial del Pacífico, las cuales se anunciaron como un “acuerdo histórico de libre comercio”, pero hasta la fecha ni el senado conoce el texto final del mismo,

Mario Can dijo que con ese acuerdo internacional “es inevitable una disminución en el poder adquisitivo de los salarios e incluso de los salarios mismos, porque al competir con potencias como Japón, Malasia, Singapur y Vietnam, que manejan salarios  de 2500 al mes, los empresarios de México tendrán que alinearse para poder competir y evitar quedar fuera del mercado”.

“Este acuerdo transformará en una utopía pensar en aumentos de sueldos en el país y, desde luego, será un fuerte golpe al poder adquisitivo de las familias”, añadió. 

También recalcó que los incentivos fiscales a los industriales mexicanos no deben ser una decisión sujeta a consideración, sino que se deben convertir en una medida real para hacerle frente a esta nueva apertura del mercado que a su vez blinde a las empresas y eviten su desaparición.

“A pesar de los aspectos negativos del TTP, reconocemos que por la dimensión del tratado México no podía quedar fuera, pues eso hubiera implicado sacar a México del mercado internacional de manera definitiva”.