|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Hoy día el auge de la utilización de nuevas tecnologías para la obtención de energía está llevando a la incorporación de gente del campo a los procesos tecnológicos, siendo en ocasiones los ejidatarios quienes quedan en medio de los intereses económicos de grandes empresas. Tal vez la tecnología a la que se le está dando mucho espacio en Yucatán es la energía eólica, un tipo de energía que puede ser de mucho provecho en todos los niveles en esta zona del país. El viento es una de las formas más baratas para obtener energías renovables. Puede competir con las plantas de carbón y es más barata que las nuevas centrales nucleares. El costo de la energía eólica varía en función de numerosos factores, que bien vale la pena analizar y conocer para que todos los sectores involucrados vean ganancias reales.

Un aerogenerador tiene la función de convertir la energía cinética del viento en energía eléctrica, reduciendo el impacto ambiental en la obtención de energía. Debemos reconocer que el viento es una fuente sostenible que nunca se agota y la transformación de su energía cinética en energía eléctrica no produce emisiones. Existen diferentes tipos de aerogeneradores, pero los más utilizados, y también los más eficientes, son los llamados tripalas de eje horizontal que asemejan a unos enormes ventiladores en medio del campo.

Hay que recordar que los proyectos de carácter ambiental aplicados en comunidades deben cumplir con tres aspectos indispensables: el económico, el social y el ambiental, claro si se quiere asegurar no sólo su autorización sino también su funcionamiento. Los planes de instalación de aerogeneradores en Yucatán han estado llenos de inconsistencias y de aplicaciones muy complicadas, pues en la mayoría no se ha cumplido a cabalidad con la parte social,

ya que los ejidatarios del sitio donde se están instalando nunca contaron con la asesoría adecuada y fueron notificados cuando la delegación de la Semarnat en el Estado ya había acordado su autorización, pues la parte económica ya estaba cubierta.

Todos los manifiestos de impacto ambiental presentados para los parques eólicos han tenido un rechazo casi generalizado por parte de los ejidatarios del sitio donde se proyecta instalarlos, porque los promoventes no han explicado los beneficios y perjuicios que se presentan en la operación de un parque de esta naturaleza, y no me extraña, pues los interesen involucrados son de muy alto nivel. Y el medio ambiente es considerado un botín.

Lo más leído

skeleton





skeleton