La verdad sobre duendes, trolls, elfos y aluxes

Mucha gente llama con nombres de criaturas primordiales de otros países a los señores del monte yucateco. Conoce las similitudes y diferencias.

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Los chaneques tienen siempre cerca a objetos de la naturaleza como, por ejemplo, mariposas. (Jorge Moreno/SIPSE)
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Jorge Moreno/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Hoy hablaremos de un tema que me pregunta la gente con mucha frecuencia y que suele confundir en sus definiciones, me refiero a los duendes.

Hay quienes mencionan por igual la palabra duende, troll, elfo y alux para referirse a la aparición de un ser de apariencia humana pero en miniatura, y que por lo general los espanta; sin embargo, estas palabras no son sinónimos y tampoco aplican en todos los casos.

Un duende es la denominación, en castellano, de un tipo de ser sobrenatural definido en la cultura popular, equivalente al goblin de otros folclores europeos, de naturaleza maliciosa contra los humanos, es un espíritu fantástico del que se dice que habita en algunas casas y que hace travesuras; en árabe significa “dueño de la casa”.

Por su parte, los elfos son criaturas de la mitología nórdica y germánica. Originalmente se trataba de una raza menor de dioses de la fertilidad y representados como hombres jóvenes y mujeres de gran belleza que viven en bosques, cuevas o fuentes.

Un trol es un temible miembro de una mítica raza antropomorfa del folclore escandinavo. Su papel en los mitos cambia desde gigantes diabólicos —similares a los logros de los cuentos de hadas ingleses— hasta taimados salvajes más parecidos a hombres que viven bajo tierra en colinas o montículos.

Creados por sacerdotes

Por último, los aluxes son tal y como ya hemos mencionado con detalle en esta misma sección, seres creados por sacerdotes mayas a través de sangre, barro y un ritual especial, con el fin de que cuiden una propiedad, ya sea un monte, milpa o una casa.

Por consiguiente, en términos generales se le puede denominar duendes a los trolls, elfos, aluxes, etcétera. Las diferencias específicas entre estos seres vienen de sus culturas y regiones.

Uno de los lectores que me sugirió este tema, Víctor Manuel Peraza (de la ciudad de Hunucmá), dijo que en el patio de su casa vio un ser extraño, del cual su papá le dijo que de trataba un duende, y posteriormente su abuelo señaló que era un alux y por último su tío aseguró que era un elfo.

Lo que es un hecho es que en Yucatán sólo podrían verse a los aluxes, ya que en el caso de los trolls y los elfos vienen de culturas completamente diferentes y son de sitios muy lejanos a nuestra tierra, por lo que no hay lógica ni sentido al hecho de verlos por aquí.

Lo que sí ha ocurrido en ocasiones, es que, por ejemplo, alguna persona de la Península de Yucatán afirme que un troll o elfo se movió o cambió de lugar, pero refiriéndose a souvenirs que son comprados en tiendas y que por algún embrujo o motivo paranormal (un alma en pena) podrían cambiar de sitio, tal y como en ocasiones ha pasado y que podría pasar con cualquier otro souvenir.

Por su parte, Rubicelia Medina, de la ciudad de Mérida, también me mandó un mail solicitando que hablemos sobre la diferencia entre los trolls y los elfos, y comenta que su hermana menor (de 21 años)
tenía un elfo que le obsequió un amigo, el cual todos los días le debía de dar agua para que éste fungiera como “protector de la casa”.

Cabe mencionar que otro tipo de duendes son los llamados chaneques, los cuales son ubicados en Veracruz, Tabasco y sitios cercanos.

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