Ana Hernández/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Hace más de 10 años que su padre falleció, y hasta el momento no terminan de ponerse de acuerdo para repartir la herencia, así que para evitar que eso ocurra con sus hijos, “María” ha decidido hacer su testamento.

Sentada en las oficinas del archivo notarial, al cual acudió en busca de información, supo que podía hacer uno hológrafo (de su puño y letra) y así lo hizo, redactando a detalle lo que recibiría cada uno de sus hijos y nietos, “porque todos tienen derecho, unos más que otros, y así lo voy a dejar”.

La mujer, de mediana edad, en etapa productiva, señaló que conoce la historia de los pleitos que implica no dejar las cosas en orden, ellos son tres hermanos que no han logrado resolver el intestado que dejó su padre, no sólo es el dinero y tiempo invertido, sino que lamentablemente las relaciones entre sus parientes se han deteriorado.

“No quiero que eso suceda con mis hijos, sé que no estarán de acuerdo, pero estoy decidiendo conforme creo que lo merecen, y lo voy a dejar claro, ya que no quiero que luego estén peleando porque no hay testamento que determine qué recibirá cada uno”, explicó.

Comentó que el testamento es lo mejor que las personas pueden hacer; a veces no se entiende la expresión de dejar en orden todo, porque no se sabe cuándo le tocará morir, puede ser en cuestión de minutos, días, meses o años, pero cuando ocurra, los herederos podrán saber cuál fue la decisión que tomó sobre sus bienes.

Insistió en que sabe que no toda su familia estará de acuerdo con la decisión que tomó en cuanto a la disposición de sus bienes, de su patrimonio, se enojarán, pero no pasará de ahí, porque fue decisión propia, además no estará para que le reclamen.

“Tal vez se enojen, pero se les pasará, lo mejor es que no vivirán lo que ha pasado con mis hermanos y conmigo, y espero que los entiendan”, comentó.