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MÉRIDA, Yuc.- El director de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán (Japay), Manuel Bonilla Campo, indicó que cerrarán el año con una morosidad del 11 por ciento de usuarios, lo que ubica a la entidad por debajo de la media nacional.

En entrevista con Notimex, explicó que de unas 308 mil tomas domiciliarias que hay en el estado, al menos 33 mil 800 arrastran adeudos con la paraestatal.

Eso, precisó, representa un 11 por ciento del padrón de usuarios, lo que coloca a Yucatán por debajo de la media nacional que es de 20 por ciento de padrón de usuarios aproximadamente.

Sin precisar lo que en dinero representa, el funcionario estatal aseguró que no es una cantidad que comprometa las finanzas de la empresa, "aunque no tenemos el monto, lo que podemos afirmar es que estamos en números negros".

También comentó que este año el número de usuarios pasó de 290 mil a 308 mil, misma que crecerá de manera sostenida por los nuevos fraccionamientos que se construyen en varios puntos de la ciudad y del interior del estado.

Según dijo, sería dentro de unos 10 días cuando en reunión de Consejo se defina si habrá o no un aumento a las tarifas y de cuánto, pero hasta ahora no hay planes en ese sentido.

"De hecho, el plan ahora es cancelar tomas de agua en domicilios abandonados porque en esas casas se factura y no se paga el servicio y solo cuando la venden, traspasan o rentan es cuando se acercan a la Japay a ponerse a corriente", refirió.

Eso permitirá ahorrar horas hombre y recursos materiales a la empresa para poder mantener el costo del servicio sin alzas el mayor tiempo que sea posible, agregó.

Recordó que fue en 2008 cuando se dio el último incremento de tarifa e insistió en que en unos días se reúne el Consejo Estatal de Administración para analizar la situación financiera y tomar decisiones de cara al próximo ejercicio fiscal.