La gran jornada

Escribo hoy mis letras más tarde que nunca y comparto entonces mi experiencia electoral...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Escribo hoy mis letras más tarde que nunca y comparto entonces mi experiencia electoral, ya que muchos olvidan que, igual que todos los mayores de 18 años en este país, soy ciudadana y disfruto de ejercer mis derechos.

Desde que cumplí 18 años aprendí a destinar tiempo para votar en familia, aunque ahora es diferente porque debo dedicar mis horas de cada jornada electoral a encabezar un profesional grupo de entusiastas ciudadanos que trabajan y buscan tiempo para cumplir con el deber.

Desde mi trinchera, este ha sido un día diferente, con muchos datos nuevos, con plataformas cibernéticas, con datos inéditos, con muchos jóvenes atentos, con un enorme aumento de casillas especiales que me dejan pensando en que el número de visitantes que tenemos en Yucatán ha crecido y rebasó las estimaciones del INE de tener 15 mil boletas para esos ciudadanos de paso, o contamos con muchos mexicanos que no se dieron el tiempo de hacer el cambio domiciliario.

Lo sé porque he cambiado mi credencial de elector este año y tuve que acudir a demostrar que no era una turista electoral. No me lo expresaron así.

Pero volviendo a la jornada, una vez más los yucatecos han demostrado que son responsables cuando se trata del deber, las filas en las casillas siempre estuvieron llenas, las mujeres se distinguen y los adultos mayores ni qué decir.

Estuve más de 40 minutos en la fila, la solidaridad de los jóvenes fue increíble dando paso a quienes necesitaban ayuda, no porque tuvieran obligación, sino simplemente porque se trataba de cooperar.

Nadie se quejó cuando cedieron su lugar a mujeres que llegaron con bastón ayudadas por otros ciudadanos de a pie. Todos organizaban para que fluyera la votación. Ese es el México que me gusta. El de la solidaridad. El de somos uno.

Yo aprovecho que es lunes y que todavía hay mucho por hacer para no olvidar estas buenas cosas que se ven dentro del mar de quejas de la jornada electoral. Que gane México. ¡Que sea feliz!

 

Lo más leído

skeleton





skeleton