Luis Fuente/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Si a usted le dicen que hay granadas en el mercado, pues no se asustaría porque sería lo más normal que en ese lugar haya "marchantes" que vendan ese fruto. Sin embargo, si le aseguran que esas granadas son las que explotan, seguro se llevaría una buena sorpresa.

Pues ayer un pepenador se llevó tremendo susto cuando al revisar un bote de basura detrás del antiguo edificio de Correos, en el centro de la ciudad, encontró dos granadas de fragmentación, por lo que hubo una movilización de la Policía y el Ejército para asegurar los artefactos, que finalmente resultaron ser de utilería.

Poco antes de las 10 de la mañana, un pepenador recolectaba latas y envases de plástico de los botes de basura en el área de Los Portales, cuando al llegar a la plazuela ubicada detrás del antiguo edificio de Correos (hoy Museo de la Ciudad) revisó un contenedor y se percató que habían dos granadas.

Luego de reponerse del susto, el pepenador fue a reportar su hallazgo a un agente de la Policía Municipal de Mérida, de modo que el uniformado fue a revisar el bote de basura y tras conformar los hechos solicitó apoyo a su central de mando.

Minutos después llegaron más agentes municipales a acordonar y retirar a las personas que estaban en esa área, en tanto llegaba personal del Ejército especializado en el manejo de explosivos.

Al sitio llegaron soldados que al revisar el bote de basura se percataron de que las granadas eran de utilería y que no podían explotar, pero de todas maneras aseguraron los artefactos y se los llevaron.

En nota previa habíamos dicho que los explosivos eran demasiado viejos y ya había dejado de ser útiles, por lo que no podían explotar.