El año va que vuela y ya estamos en el mes de octubre y en pleno otoño. Aunque oficialmente el pasado 22 de septiembre empezó la estación otoñal, el Equinoccio de Otoño, o sea la igualdad del día y la noche, ocurrió el pasado viernes 28 de septiembre para la zona donde se ubica la Península de Yucatán; con la llegada de esta estación las condiciones del tiempo comienzan a cambiar.

En estas fechas empieza a dominar un aire que sopla en dirección del este y noreste, más fresco, en vez del que venía del este y sureste, que era más caluroso, y con ello las tardes son más agradables, menos calurosas, y las probabilidades de ocurrencia de lluvias irán bajando, sobre todo a partir de la segunda quincena de octubre, salvo que llegue algún mal tiempo o ciclón, lo que aún puede ocurrir por supuesto. Los amaneceres serán un poco más frescos y el sol poco a poco irá saliendo más tarde y ocultándose más temprano.

El pasado domingo 30 de septiembre finalizó la parte más peligrosa de la temporada de huracanes mas no la época en que se forman esos fenómenos meteorológicos, que terminará hasta el próximo 30 de noviembre, de modo que aún pudiera ser que algún ciclón tropical pudiera llegar a la zona, aunque conforme avance el mes de octubre las posibilidades de que esto ocurra irán disminuyendo paulatinamente para Yucatán, no así para Quintana Roo que aún está en peligro de sufrir alguna afectación.

Otro fenómeno meteorológico que comenzó a fines de septiembre es la temporada de frentes fríos para la república mexicana, pero esos sistemas polares deberán de empezar a llegar a Yucatán hasta la segunda quincena de octubre y los primeros por lo general no traerán frío y bajas temperaturas sino más bien lluvias.

Por último, se activará la última zona de donde saldrán los posibles últimos ciclones tropicales de la temporada, que es el área conocida como el Golfo de Mosquito en el Mar Caribe, que se encuentra al norte de Panamá, este de Nicaragua y noreste de Costa Rica, y algunos de estos fenómenos tenderán a acercarse a la Península de Yucatán, aunque la gran mayoría se moverá al norte.