Francisco Puerto/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Más de quince elementos de la Gendarmería y la Policía Federal efectuaron un operativo de verificación en el Centro de Reinserción Social de Mérida (Cereso), con el fin de constatar las condiciones en que se encuentran las instalaciones del reclusorio, por haber entrado en vigor recientemente el Nuevo Sistema de Justicia Penal Federal.

Los agentes llegaron cerca del mediodía a la penitenciaría a bordo de tres vehículos oficiales y dos particulares, para enseguida dirigirse a la rampa.

Estuvieron encabezados por el inspector general de la Policía Federal, Roberto Rodríguez.

En primer lugar, en las afueras del penal se entrevistaron con directivos del reclusorio y de la Secretaría de Gobierno del Ejecutivo del Estado.

Mientras se efectuaba la plática informativa, estuvieron tomando fotografías de los alrededores del penal, al igual que al túnel que lo une al Centro de Justicia Oral de Mérida (Cejom), en especial a los “respiraderos” que se encuentran muy expuestos.

Una vez en el interior, no tardaron más de una hora y al salir abordaron los autos en los que llegaron y se retiraron.

Antes de partir, el inspector informó de los motivos de su presencia en el lugar, indicando que era para constatar la infraestructura carcelaria por la entrada en vigor, recientemente, del Nuevo Sistema de Justicia Penal Federal, haciendo un recorrido en los principales puntos del lugar.

Incluso, expresó que ya han hecho lo mismo en la sala de audiencias federales.

Nada que ver con los tamaulipecos

Cuestionado sobre si su presencia era con motivo de la audiencia de vinculación de una pareja de tamaulipecos que fueron detenidos con drogas y armas, resaltó que no, porque ese asunto era del fuero común.

Acto seguido, se despidió y seretiró con los agentes que llegaron con él.

El operativo fue muy discreto y tomó por sorpresa al personal del penal y a la guardia permanente de la Secretaría de Seguridad Pública.

A diferencia de otras ocasiones, esta vez el operativo no tuvo como fin localizar armas, drogas y otros objetos prohibidos entre los internos.