Candelario Robles/ Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- Ante el crecimiento de las empresas restauranteras en Mérida, es preciso establecer una certificación de categorías y buscar una mayor calidad en el uso de los productos y alimentos que se generan en el sector gastronómico, comentó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados de Yucatán (Canirac), Carlos Campos Achach.

El dirigente empresarial indicó que el número de restaurantes certificados con “Distintivo H” son muy pocos, por ello, el sector buscará que las empresas estén certificadas para elevar la calidad en el sector turístico, y con ello mejorar los productos y servicios que se venden en estas empresas.

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Uno de los problemas por los que las empresas yucatecas no se certifican, es por el pago que representan estos servicios, pero es necesario decir que son exigencias del mercado y los restauranteros tienen que mejorar y superarse, elevar su competitividad ante otras marcas.

Campos Achach destacó que el mercado local ha crecido y es preciso también darle una categorización a estas empresas y Canirac está consciente de que debe establecer qué restaurantes son cinco estrellas, cuatro, tres y así sucesivamente, con normas y mecanismos de soporte, para que las empresas respondan a un proceso de superación.

“El número de restaurantes que han logrado un Distintivo H -certificación que ofrece la Secretaría Federal de Turismo- son muy pocos y es preciso que más empresarios completen estos mecanismos y puedan presumir el manejo de sus alimentos fríos, calientes, sus mesas de alimentos y control de calidad de sus productos, porque el turismo exige tener un servicio de mayor calidad y todo esto es en beneficio de las propias empresas”.

El líder de los restauranteros señaló que se busca un mayor acercamiento con las autoridades del ramo, para darle una mayor atención en estos temas a los restauranteros.

“Buscaremos una mayor comunicación con las autoridades y poder darle a los empresarios la información para obtener estos distintivos, que permiten y exigen controles y mayor eficiencia del personal y el uso de sus elementos en el proceso, elaboración y calidad de los productos alimenticios que se venden”, concluyó.