Acuse de recibo

Vía postal he recibido el último libro del guatemalteco Arturo Arias...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Vía postal he recibido el último libro del guatemalteco Arturo Arias, titulado El precio del consuelo. Fiel a su concepción de que los chapines son errantes en el mundo, este escritor ha vivido en diferentes partes del planeta. Académico de grandes vuelos e innovador en el lenguaje escrito, enseña y escribe en prestigiadas universidades norteamericanas. Actualmente posee la cátedra John D. and Catherine T. MacArthur de Humanidades en la Universidad de California.

Durante algunos años sus proyectos en lengua española y portuguesa en la Universidad de Texas, en Austin, le permitieron realizar importantes investigaciones sobre la literatura indígena  maya. Compartimos algunos eventos en la Universidad del Oriente en Valladolid, invitados por Dr. Carlos Urzaiz, entonces rector de esa casa de estudios.

El precio del consuelo es una obra escrita sobre el abuso del poder ejercido en la zona  indígena guatemalteca de Rabinal; para mejor ubicación, se trata del embalse del Río Negro para crear la presa Pixoy. Este hecho es transversal a muchas denuncias realizadas por los grupos étnicos latinoamericanos en donde las políticas neoliberales han pasado por encima de los derechos indígenas internacionales, emanados de declaraciones universales. Los indígenas guatemaltecos -en esta novela- se quejan por no ser consultados para la construcción de la presa, que cambió definitivamente el camino de sus vidas; por pura coincidencias, comunidades mayas han levantado la voz para denunciar la violación de sus derechos, al no ser consultados para construir inmensos parques eólicos en la península yucateca, del mismo modo el territorio zoque mantienen una tenaz lucha para evitar que la explotación petrolera los desarraigue de sus tierras ancestrales.

Esta novela de Arturo Arias me ha recordado, en otro contexto, al peruano de Huancavelica Manuel Scorza, en Redobles por Rancas, y el ecuatoriano Jorge Icaza, autor de Huairapamushcas. En esta trenza de obras, las violaciones, misticismos, discriminaciones, abusos a particulares y comunales son la transversalidad en la realidad cotidiana.

Esta obra tiene sus puntos de innovación narrativa, pertenece al género de novela de golpe, en donde las oraciones manifiestan un hecho por sí solo, pero enhilado en el tiempo. Fue una de las cinco finalistas del certamen BAMletras. Su contenido es observado desde una posición de izquierda, ideología asumida por el autor, quien siempre tiene el cuidado de no dejar que la ideología domine la novela, porque, según su opinión, cuando la ideología es dominante en la obra, ésta se convierte en un panfleto político.

Lo más leído

skeleton





skeleton