Recientemente se celebró el Día del Niñ@ y quisiera señalar que los menores son sujetos de Derecho y deben recibir amor y comprensión. Continuando con el tema de Abuso Sexual Infantil (ASI), seguramente muchas personas se pueden preguntar: ¿cómo saber si un menor es abusado? 

En su gran mayoría puede llevar meses e incluso años antes de ser detectado y todo ese tiempo el menor está siendo violentado.

Dado que el agresor  evita dejar señales del abuso, hay algunos elementos ante los cuales, como padres, cuidadores y en especial el personal de salud, debemos estar pendientes. 

En edad preescolar (2-5 años) alteraciones del sueño: pesadillas, terrores nocturnos o insomnio, llanto incontrolable, tristeza, retraímiento, especialmente si el menor no lo era previamente, conductas hipersexualizadas para la edad,  temores inexplicables a personas (algunas veces esta persona puede ser el abusador/a) o situaciones parecidas deben llamar la atención. 

Igualmente el hecho de un niñ@ que nuevamente empiece a orinarse por las noches, la presencia de comportamientos agresivos, conductas regresivas (esto es  actuar como si se tuviera menos edad de la real) y una excesiva sumisión a los adultos deben considerarse. 

En escolares (6-11), a todo lo señalado se puede añadir: temor generalizado a varones, cambios bruscos en el rendimiento escolar, comportamientos inusuales como no querer desvestirse para dormir o querer pasar mucho tiempo fuera de casa, mentiras, fugarse de casa, prácticas delictivas (robar), también puede ser que el menor intente o realice actos sexuales forzados con otros niñ@s.

Más de ASI la próxima semana.