A menos de 60 días que el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador y su equipo de trabajo, para que tome las riendas de nuestro país, se ha iniciado el proceso de solicitud de información en las diferentes áreas gubernamentales para conocer el estado actual de cada dependencia, que posteriormente y a partir del primero de diciembre del presente año, cada titular designado a ocupar dichos cargos, entonces podrán conocer exactitud la situación real de cada área, y entonces podrán ordenar suspender o enriquecer cada proyecto gubernamental que este en operación vigente.

Administrar o encabezar cualquier oficina de gobierno no es cualquier cosa, se requiere de mucha capacidad, conocimiento en la administración pública y honestidad. Seguramente hay muchos funcionarios que han trabajado con cabalidad, otros como ya sabemos el caso de varios gobernadores, no cumplieron con el servicio público y con el país, que les confió administrar, pero repito hay muchos funcionarios actuales que han cumplido decorosamente su cargo.

Como un ejemplo está el Conacyt, importante dirección general como su nombre lo indica, responsable del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología de México. La mención viene a mi interés de comentar, debido a una serie de mensajes recibido a mi cuenta por decenas de estudiantes mexicanos radicados en el extranjero cumpliendo una preparación académica, lograda gracias a esta institución. Procesos legales y trasparentes para lograr una beca, jóvenes catedráticos se encuentran muy preocupados. Ello gracias a una inusitada carta dirigida al Dr. Enrique Cabrero Mendoza, por parte de la doctora María Elena Álvarez-Buylla Roces, en el que le notifica suspender (equívocamente) diferentes convocatorias y contratos que hayan sido emitidos después del 31 de julio.

Dentro del escrito sustentado por el artículo 61 del Acuerdo por el que se establecen los lineamientos generales para la regulación de los procesos de entrega-recepción y de rendición de cuentas enviado al doctor Cabrero Mendoza, simplemente no proceden por carecer de facultades legales para ordenarlo, como lo indica dicho documento.

Sin tener el gusto de Conocer a la doctora Álvarez-Buylla, me parece qué ha sido mal asesorada, pues aún falta que la nombre el Secretario de Ramo de dicha dependencia o el mismo presidente de la República Mexicana en funciones la asigne, para poder contar con dichas facultades, que la Ley le puede permitir. Debo insistir, mi respeto a la doctora Álvarez-Buylla, pues quien escribe tiene un enorme interés por la ciencia de mi país, mis columnas y trayectoria lo avalan, sin embargo creo que hay un error en sus pretensiones.

Es responsabilidad por mandato de la ley del doctor Enrique Cabrero Mendoza, actual director del Cocyt, ejercer el presupuesto de 2018, de nadie más. Lo que si le recomiendo sentarse a platicar con la doctora María Elena, para trabajar juntos en construir el próximo presupuesto de 2018.   Estoy seguro que ambos investigadores sabrán resolverlo, con la ley en la mano.

*Premio Nacional de Periodismo 2008 y 2016. Premio México de Periodismo 2013. Premio Nacional de Locución 2017. Director de la revista Medicina Cientifica.