La producción de tv fue para Trump

La expresión de Luis Videgaray, el mexicano más cercano y admirado por Donald Trump, no dejaba duda...

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El domingo por la noche en Washington, la expresión de Luis Videgaray, el mexicano más cercano y admirado por Donald Trump, no dejaba duda: ya había acuerdo sobre el Tratado de Libre Comercio.

Y así se organizó todo para que a las 10 de la mañana se hiciera el anuncio desde el Despacho Oval, en una puesta en escena nunca vista en esa Casa Blanca: sentaron a las tres claves de la negociación de su gobierno y a su izquierda a los tres mexicanos: Videgaray, Ildefonso Guajardo y Jesús Seade, representante de Andrés Manuel López Obrador.

Entró Trump, saludó a los suyos y a los de acá, con una marcada distinción a Videgaray, a quien le atribuye el acuerdo final sin Canadá, abriéndole el espacio para el acuerdo bilateral, la muerte del Nafta, como había jurado en su campaña y una palanca de presión contra su odiado Justin Trudeau.

Trump se sentó en el sillón del escritorio del hombre más poderoso del mundo, donde demostró que no sabe cuál es el botón del speaker de su teléfono, al que decía: Enrique… Enrique… y ante el silencio, de mal modo pidió a un asistente que arreglara el problema, lo que resolvió apretando un botón.

Y ya hablaron los dos, bueno, habló Trump, anunciado el entendimiento para crear el Acuerdo de Libre Comercio Estados Unidos-México, en una pantalla que llenaba de naranja y en la que se escuchaba a distancia la voz del presidente Peña Nieto, lo que yo creo que se pudo haber operado para tener una presencia televisiva conjunta.

Alguien me dijo que la producción fue de última hora, pero yo digo que si pudieron negociar un acuerdo de libre comercio, bien pudieron haber negociado una presencia pareja de los dos presidentes, a menos que lo que se transmitió hubiera sido parte del acuerdo final: dejar todo a Trump, como quería, y aparecer ante los estadunidenses como un hombre que cumple sus promesas de campaña, desaparecer el Nafta, como allí anunció.

Pero si me insisten, como me insisten, en que fue un acuerdo comercial parejo para los dos países, la transmisión por televisión no fue pareja para los dos presidentes.

RETALES

  1. REBELIÓN. Ricardo Anaya ignoró el ofrecimiento de Rafael Moreno Valle y nueve gobernadores para que uno de los suyos fuera presidente del PAN y Héctor Larios, secretario general, por lo que surgió el frente que propone a Larios presidente y al mismo Moreno Valle secretario general;
  2. PROCESO. Ya se instaló la comisión electoral para la renovación de la dirigencia del PAN, la convocatoria se publicará en noviembre y la elección, a más tardar, en diciembre. También se renuevan todas las dirigencias estatales del partido; y
  3. ELECCIONES. En julio próximo serán las primeras elecciones de la presidencia de López Obrador y todas son en cinco estados panistas: Querétaro y Tamaulipas, congresos locales; Aguascalientes y Durango, alcaldes, y Baja California, donde comenzó todo en 1989 con Ernesto Ruffo, que eligen gobernador, alcaldías y Congreso. Y después de 30 años, todo indica que la perderán ante el candidato de Morena.

Nos vemos mañana, pero en privado

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